Congreso Nacional de la Empresa Familiar

La empresa familiar ve en la falta de gobernabilidad un obstáculo al crecimiento

La ministra de Economía y Empresa en funciones, Nadia Calviño, durante la inauguración del congreso, este lunes en Murcia.

La ministra de Economía y Empresa en funciones, Nadia Calviño, durante la inauguración del congreso, este lunes en Murcia. / Rafa Martín

La gran empresa familiar aumenta su pesimismo a escasos días de las elecciones a Cortes Generales del próximo 10 de noviembre, respecto a la visión de la evolución económica que expresó hace un año. Y pone el énfasis en que la falta de gobernabilidad está lastrando el crecimiento. Desde 2008, en cada edición del Congreso Nacional de la Empresa Familiar, un sector que supone el 60% del PIB español, el 90% de las empresas y el 80% del empleo, el Instituto de la Empresa Familiar organiza una encuesta interactiva con la que pulsa la opinión de sus asociados para dar una radiografía de cómo ven la economía y el futuro inmediato de sus compañías. 

Hace un año, en el congreso celebrado en Valencia, los empresarios familiares empeoraron sus perspectivas tras el cambio de Gobierno. Hoy, al inicio de la 22º edición, que se celebra en Murcia, los más de 600 participantes profundizan en su pesimismo. Tras meses de Gobierno en funciones y una Legislatura fallida y con el mismo Presupuesto que dejó el último Gobierno del PP, empeoran sus perspectivas económicas y señalan a la gobernabilidad como el principal riesgo para España.  

La percepción de empeoramiento de la economía se consolida entre los grandes empresarios familiares, tras constatar durante dos años consecutivos signos de desaceleración y riesgos políticos. La evolución de los últimos cuatro años lo deja a las claras. La línea ascendente de la percepción de este relevante sector del PIB español se truncó el año pasado. Y en esta edición confirma un pesimismo levemente mayor. 

Hoy, en Murcia, los inscritos en el congreso dieron una nota de 5,33 sobre 10 a la situación económica actual, lo que lo sitúa casi al nivel del 5,31 que otorgaron en los dos años precedentes, 2015 y 2016. La nota empeora la otorgada hace un año en Valencia, donde bajaron a un 5,48 el 6,22 que le otorgaron en Toledo un año antes, en 2017, pese a que era 2 de octubre y la sociedad española estaba noqueada por lo sucedido la víspera durante el referéndum ilegal en Cataluña. 

Esta visión más negativa se unió a que los empresarios señalaron a la gobernabilidad como el mayor riesgo nacional, seguido por la necesidad de aplicar reformas estructurales. Ese dato se invierte al hacer la misma pregunta respecto a Europa, en la que las reformas se anteponen al problema de gobernabilidad. La gran empresa familiar, por tanto, estima que es un problema que en España está agudizado. 

Por si quedaba alguna duda, el presidente del Instituto de Empresa Familiar, Francisco Riberas, en su discurso de apertura del congreso, hizo un llamamiento a “recuperar la normalidad lo antes posible, porque es muy peligroso proyectar la imagen actual ante los clientes e inversores internacionales por más tiempo”, afirmó tras enfatizar como problemas los años que España lleva con Gobierno en funciones o inestables y la situación que atraviesa actualmente Cataluña, con impactantes escenas de guerrilla urbana desde que se conoció la sentencia que condena por sedición a los líderes del procés que están presos. 

En este contexto político y económico, la encuesta interactiva también puso de manifiesto que ese pesimismo empresarial se traslada respecto al futuro a corto y medio plazo. Así, el 63% consideró este año que el crecimiento de la economía española será frágil y sin creación neta de empleo, frente al 41% que dio esa respuesta hace un año. Sólo el 1% confía en que haya un aumento rápido de la actividad económica y creación neta de empleo–en 2018 era un 2%– y otro 36% confía en un moderado crecimiento con una limitada creación de puestos de trabajo –en 2018 era el 57%–.

En línea con lo anterior, sólo el 46% espera un aumento de la cifra de ventas de su compañía en 2019, frente al 64% que lo esperaba a finales de 2018. También aumentan al 19% los que prevén recudir ventas y al 35% los que calculan una cifra de negocio similar, frente al 8% y el 28%, respectivamente, de hace un año.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios