El mayor alijo de cocaína incautado en Sevilla —1.097 kilos escondidos en un cargamento de plátanos- se cerró este jueves con unas condenas de entre 2 y 5 años de cárcel, frente a los 13 años y tres meses de cárcel que solicitaba inicialmente la Fiscalía.

La rebaja fue posible porque la Fiscalía retiró la acusación de organización criminal para los cinco acusados -por la que pedía un año y tres meses de cárcel- y rebajó la condena por tráfico de drogas desde los 12 años que solicitaba antes del juicio a una condena de 5 años para el cabecilla y cuatro años para dos de los acusados como coautores del delito.

A otros dos acusados, la Fiscalía rebajó su participación a cómplices en lugar de autores y la condena que les impuso la Sección Primera de la Audiencia quedó en dos años de cárcel. Estos dos acusados son los únicos que estaba libres desde hace unos meses.

La pena aceptada por los acusados incluye una multa de 21,5 millones de euros a cada uno.

Cuatro de los cinco acusados fueron detenidos en mayo de 2019 y el quinto, Jesús B.A., dueño de la nave de El Palmar de Troya donde se descargó el alijo, estuvo huido de la Justicia catorce meses hasta que fue detenido en julio de 2020.

Fue la mayor incautación de cocaína en la historia de Sevilla: 1.097  kilos que estaban escondidos entre plátanos llegados al puerto de Algeciras procedentes de Guayaquil (Ecuador).

El 6 de mayo de 2019, el buque Santa Regula partió del puerto de Guayaquil con destino a Algeciras. Llegó el 21 de mayo con tres contenedores en los que se declaraba un cargamento de bananas aunque uno de ellos transportaba en realidad los 1.097 kilos de cocaína. Esta circunstancia “era conocida por José Luis M.C., administrador único de la empresa importadora”, según el fiscal.

La Policía permitió una entrega vigilada y siguió al camión conducido por el segundo acusado, German L.P., quien también “tenía pleno conocimiento” de que transportaba cocaína. De madrugada salió del recinto portuario de Algeciras y tomo la autovía en dirección a Sevilla hasta la salida de Las Cabezas de San Juan.

Durante todo el viaje, según la Fiscalía, un vehículo Seat Ibiza de color negro realizó labores de contravigilancia desde Algeciras hasta Las Cabezas, si bien su conductor no fue identificado. Esas labores fueron sustituidas por un Mini Cooper conducido por Jesús B.A. y un Nissan Juke ocupado por los otros dos procesados, Mario G.L., y Pedro Pablo C.B.