Cuando Óscar Fernández León, el decano electo del Colegio de Abogados de Sevilla habla de cómo se plantea los próximos cuatro años al frente de la institución de la calle Chapineros. Hay dos conceptos que  repite: trabajo y escuchar a los compañeros. Tanto es así que, aunque no tomará posesión de su cargo hasta el próximo mes de enero, la futura junta de gobierno está perfilando cómo llevar a cabo la hoja de ruta propuesta en su candidatura durante todo el mes de diciembre.

"Justo en el momento en el que se produzca el traspaso de poderes, tendremos toda la responsabilidad y nos pondremos a trabajar. Eso no quita que durante todo el mes de diciembre vamos a analizar y familiarizarnos en profundidad con todo lo relativo al Colegio. Es decir, conocer la institución más a fondo e ir creando las distintas comisiones y grupos de trabajo, decidiremos qué diputados y colegiados las van a integrar", explica. Para Fernández León en todo este proceso es importante la planificación, "establecer una serie de objetivos por cada comisión que estarán controlados anualmente por la Junta del Gobierno", advierte el decano electo.

El nuevo decano obtuvo un total de 1.959 votos en unas elecciones donde la participación cayó diez puntos con respecto a las de 2018. Sólo el 17,48% de los 7.851 colegiados se acercaron hasta las urnas. A este respecto, Fernández León recuerda que el abogado sevillano, tradicionalmente "vota poco" en los comicios de la institución, un hecho que, "unido a un ambiente electoral escaso", puede explicar el poco número de votantes. En cualquier caso, asegura estar estudiando las razones.

"Hubo un 10% menos de participación que en las de hace cuatro años, pero solo un 5% menos que en las de hace ocho años. Quizá el colegiado estaba contento con el trabajo realizado durante los últimos cuatro años y les ha cogido, prácticamente, de improviso. Lo cierto es que ninguna de las cuatro candidaturas hemos conseguido crear ambiente electoral", explica el nuevo decano. Con los nuevos estatutos, aprobados el pasado mes de julio, estas serán las últimas elecciones presenciales, puesto que el nuevo equipo al frente del Colegio tiene el reto de implantar el voto electrónico.

La reivindicación de la profesión

Uno de los puntos que más interés ha levantado entre los abogados durante la campaña ha sido el de la dignificación profesional. "La dignificación profesional la vemos desde tres perspectivas. La primera es la situación en la que se encuentra el colegiado ante la Administración Pública como retrasos, instalaciones, esperas, etc.", explica. Otros aspectos que el Colegio tendrá en cuenta son el trato respecto a los operadores jurídicos y la propia relación con los compañeros," la dignidad que deben tener unos compañeros con otros".

Una dignificación de la profesión que tiene mucho que ver también con el turno de oficio, "porque hay muchas quejas del trato que algunos clientes tienen con sus letrados de oficio". En definitiva, se trata de abordar todos estos aspectos y para conseguirlo, "es importante escuchar a los colegiados, saber lo que ocurre, e intentar alcanzar acuerdos o recomendaciones con la Administraciones Públicas, especialmente de Justicia para que las conductas que afectan a la dignidad del profesional se vean reducidas. Es decir, hacer un trabajo institucional pero con la base de lo que nos cuentan nuestros compañeros en su día a día".

Para conocer de cerca todas estas situaciones, el nuevo equipo está estudiando varias opciones. "En principio, además de reuniones con abogados de diferentes colectivos, están las encuestas, que nos pueden ayudar mucho para tener una idea de lo que pasan. A esto se unen las propias comisiones y la experiencia de algunas en concreto como la de Defensa del Abogado, que puede aportar mucha información sobre las estadísticas de quejas que se han recogido en los últimos años".

Nuevas comisiones y reforma de las existentes

La pandemia ha sido un revulsivo a las formas de entender la vida y las relaciones sociolaborales, sacando a la luz situaciones y necesidades que permanecían ocultas. Una de ellas ha sido la importancia de la salud mental. De hecho, Óscar Fernández pondrá en marcha una Comisión de Salud Mental en el Colegio de Abogados, una de las propuestas de su programa electoral. Otra de las nuevas será la de Cultura, Ocio y Deporte, para convertir al Colegio en un lugar de reunión efectivo de los abogados sevillanos que, además, permita abrir la sede de la calle Chapineros a los ciudadanos a través de actividades culturales.

Este es uno de los puntos en los que la Junta de Gobierno electa ya está trabajando. "Hay un comité ejecutivo que irá decidiendo funciones y miembros de cada comisión. Primero decidiremos qué diputados van a cada comisión y cómo se configuran los equipos de trabajo. Habrá miembros de la Junta de Gobierno en todas ellas. Ahora bien, cada equipo de trabajo puede estar compuesto por otros colegiados", afirma el decano. Hay que tener en cuenta que ninguno de estos trabajos están retribuidos, igual que ocurre con todos los cargos de la Junta y el decanato.

Los grandes retos: Turno de oficio y Ciudad de la Justicia

El próximo mes de enero está previsto que se publique la Orden Reguladora de las Guardias, por lo que es previsible que se mejore la base de negociación de las retribuciones del turno de oficio. Aquí tendrá un papel especial el Cadeca, donde el Colegio de Abogados de Sevilla trasladará todas las peticiones de los compañeros de  Justicia Gratuita. Estamos muy sensibilizados con el tema del turno de oficio y haremos todo lo posible para que se escuchen las peticiones de los letrados sevillanos y mejorar". 

Óscar Fernández León

"La Consejería de Justicia es quien tiene que legislar sobre el turno de oficio porque tiene transferidas las competencias. Con la publicación de la orden reguladora de las guardias, comenzará la fase de negociación de las retribuciones  y aquí es donde tendrá un papel importante el Cadeca, el órgano de gobierno de todos los decanos de Andalucía. Ahí es donde tenemos que trasladar todas las peticiones que nos hacen llegar nuestros compañeros sobre las mejoras del turno de oficio. El Cadeca está muy unido en este aspecto", asegura.

Otro de los retos que estarán enlazados a su mandato será el de la futura Ciudad de la Justicia. Si se cumplen los plazos anunciados por José Antonio Nieto, estará en funcionamiento a finales de 2027 o principios de 2028. "En el mismo momento en el que  tome posesión contactaré con los responsables técnicos del proyecto y pediremos garantías de movilidad de accesibilidad tanto a clientes como abogados y vigilaremos que el espacio destinado al Colegio en Palmas Altas sea digno y acorde con las necesidades del cuarto colegio de abogados en España en cuanto al número de miembros". 

Un proyecto a largo plazo

En líneas generales, Óscar Fernández León propone para los próximos cuatro años un programa de trabajo en el que el objetivo es hacer del Colegio de Abogados una casa para todos los abogados de Sevilla. Un trabajo que, como él mismo reconoce, quizá no dé frutos a corto plazo, pero que sentará las bases para e futuro. Un ejemplo concreto en este sentido es el deseo del refuerzo de la deontología profesional. "Tendremos un Colegio deontológicamente completo y para ello comenzaremos a tomar medidas desde ya mismo. Se trata de sentar las bases para un futuro".