¿Cuánto cuesta dormir en la casa palacio de Sevilla de las primas de la duquesa de Alba?

Hasta dieciséis personas pueden pasar la noche por 4.480 euros en pleno barrio de Santa Cruz

Una de las estancias de la casa palacio sita en el barrio de Santa Cruz
Una de las estancias de la casa palacio sita en el barrio de Santa Cruz / M. G.

Sevilla/La casa palacio de las primas de la inolvidable Cayetana de Alba (1926-2014) ya se puede alquilar con fines turísticos. Se trata del espléndido inmueble que se localiza en pleno barrio de Santa Cruz. Un portal especializado comercializa el uso turístico de este hermoso edificio, incluido en el conjunto histórico declarado de la ciudad. En el catastro aparece a nombre de María del Carmen Eugenia Fitz James-Stuart y Gómez, condesa de Castroponce, y hermana de Mencía, marquesa del Valle de Paloma, las dos hijas de Fernando Fitz-James Stuart y Saavedra (1922-1971), duque de Peñaranda del Duero, cinco veces grande España y primo hermano de la difunta duquesa de Alba que tanto se identificó con Sevilla hasta el punto de hacer de la Casa de las Dueñas su residencia habitual y estar enterrada en el santuario que es sede canónica de la Hermandad de los Gitanos.

El precioso patio muy fotografiado por los turistas
El precioso patio muy fotografiado por los turistas / M. G.

Pasar la noche en este enclave privilegiado tiene un precio de 4.480 euros, muy elevado, pero permite un máximo de diecinueve huéspedes que pueden disfrutar de estancias con una decoración exquisita en un edificio catalogado. La casa está justo enfrente de los jardines del Real Alcázar. Se alquila completa, con un mínimo de cuatro habitaciones que pueden ser hasta nueve en función del número de huéspedes. Cada habitación extra, tiene un coste adicional. El alquiler incluye el desayuno, la limpieza diaria de habitación y la opción a un cocinero.

Una de las estancias de la casa palacio sita en el barrio de Santa Cruz
Una de las estancias de la casa palacio sita en el barrio de Santa Cruz / M. G.

Las vistas son “majestuosas”, según la agencia encargada de la comercialización, que, como es lógico, no informa de la identidad de la titular del inmueble ni en principio de la dirección, que se no facilita hasta que se formaliza la reserva. La casa palacio dispone de terraza privada con posibilidad de admirar el mejor paisaje de la ciudad desde todas las perspectivas. También cuenta con una “piscinita”, según siempre la información comercial, donde combatir las altas temperaturas en una ciudad como Sevilla, donde se sufre la amenaza de calor seis meses al año.

Se trata de un “lugar de ensueño para unos días inolvidables”, según la agencia. El barrio de Santa Cruz, no se olvide, tiene una trama urbana que garantiza la sombra todo el día en la gran mayoría de sus calles, cosa que agradecen los visitantes menos acostumbrados al calor de Sevilla.

Una de las estancias de la casa palacio sita en el barrio de Santa Cruz
Una de las estancias de la casa palacio sita en el barrio de Santa Cruz / M. G.

Todos los dormitorios de la casa tienen cuarto de baño propio. Quizás sea una de las casas con el patio más fotografiado por los turistas que toman cada día el barrio de Santa Cruz, pero menos conocida por los sevillanos. No digamos el interior, de diseño muy exclusivo y que ahora ve la luz al ser ofrecida la casa en alquiler. El servicio de la casa realiza de manera diaria la limpieza de habitaciones y servirá el desayuno. Con el alquiler, se tendrá acceso a todas las zonas comunes (salones, comedor, terrazas, azotea).

Otra perspectiva del patio
Otra perspectiva del patio / M. G.

El propio portal plantea la posibilidad de pasar la Nochevieja en esta casa palacio con un total de tres noches. La entrada sería el 30 de diciembre y la salida el 2 de enero para 16 personas. El precio total de esta estancia es de 13.440 euros. La decoración, como se aprecia en las fotografías, es de línea clásica, suntuosa y marcada por la aristocracia de su titular, la misma que adornaba la casa cuando era habitada por sus dueños. Cuanto se aprecia no tiene nada que ver, por supuesto, con la línea minimalista y funcional que domina hoy la mayoría de las estancias con fines turísticos.

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