Los espejitos de las Cigarreras: la nueva estética que marca la llegada a la Feria de Sevilla
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Se aprecia ya el impacto del muro cortina de vidrio de uno de los edificios del proyecto urbanístico que modifica el paisaje del río
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Sevilla/Los miles de ciudadanos que acuden desde este domingo a la Feria de Sevilla por el Puente de Los Remedios podrán comprobar cambios sustanciales en el paisaje del Guadalquivir. Se alzan ya gran parte de las construcciones contempladas en el proyecto urbanístico denominado Jardín de las Cigarreras, en la parcela del antiguo aparcamiento P-3 en la Avenida de Adolfo Suárez. El proyecto contempla un paseo fluvial público, un aparcamiento subterráneo e importantes zonas de ocio y jardines. El cambio más importante es el que ya se aprecia por efecto del más que llamativo revestimiento de cristal del edificio más alto, un inmueble marcado por una estética de espejos. Se trata de lo que se conoce en arquitectura como un muro cortina de vidrio, una fachada ligera, acristalada e independiente de la estructura resistente del edificio. Se construye por delante de la fachada y, por consiguiente, condiciona la estética final.
Actualmente avanza con celeridad la construcción de los edificios principales. El primero con sótano, dos plantas sobre rasante y mirador; y el segundo, denominado Puerto Tartessos, compuesto por una primera planta y también un mirador, que estará dedicado a la restauración.
El denominado proyecto Jardín de las Cigarreras es una de las actuaciones más singulares de las que se ejecutan en terrenos de la Autoridad Portuaria de Sevilla. Una vez en marcha, supondrá un "estupendo mirador hacia el Guadalquivir", como siempre destaca la Autoridad Portuaria. El proyecto, ubicado frente al Muelle de Delicias, se incorpora a los trabajos de integración de esta zona del Puerto.
El paisaje del río no sólo se modificará sustancialmente por este gran proyecto. El que avanza desde el pasado verano a mayor velocidad es el del Jardín de las Cigarreras, que supone ya cambios importantes en el paisaje urbano no solo si se mira esa orilla del río desde el Muelle de Nueva York, sino desde los bloques de viviendas y desde las instalaciones del Círculo Mercantil.
Los cambios seguirán yendo a más en esta misma orilla. Y no serán menores. No hay que olvidar que en la parcela cercana de Altadis está prevista la construcción de un hotel de ocho plantas que generará otro cambio importante en la imagen que hasta ahora hemos tenido de esa parcela desde el Paseo de las Delicias. En el Paseo de Colón se tramitan proyectos relacionados con apartamentos turísticos que inciden en la estampa hasta hace poco habitual de esta zona desde el Puente de Triana.
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