La hora de Von der Leyen fue la hora de la ampliación de la Unión Europea (UE). La presidenta de la Comisión Europea (CE) este miércoles, en su discurso en el debate del Estado de la Unión, una apuesta decidida por la ampliación, aunque evitó dar plazos sobre cuándo debería cristalizar que el club de los Veintisiete supere la treintena de miembros.

“La historia nos llama ahora a trabajar para completar nuestra Unión”, afirmó Von der Leyen, y precisó que “más allá de la política y la geopolítica”, la UE necesita “establecer una visión para una ampliación exitosa” para lograr “una Unión completa con más de 500 millones de personas que viven en una Unión libre, democrática y próspera”.

Lo que persigue es, dijo, “una Unión completa con jóvenes que puedan vivir, estudiar y trabajar en libertad, una Unión repleta de democracias vibrantes en las que los poderes judiciales sean independientes, las oposiciones sean respetadas y los periodistas estén protegidos”.

Porque, según enfatizó, el Estado de Derecho y los derechos fundamentales siempre han sido y serán la base de nuestra Unión –en la situación actual– y en los futuros Estados miembros.

Por eso sostuvo que la Comisión ha convertido los informes sobre el Estado de Derecho en una prioridad clave que “está dando resultados”.

Por ello propuso que se puedan hacer informes del mismo tipo para los futuros Estados miembros, con el objetivo de que “los países en vías de adhesión que se pongan al día aún más rápido”.

Tras recordar que el desafío de la gran ampliación de hace 20 años ha sido un éxito, porque desde entonces Europa ha visto una historia de éxito económico que ha mejorado la vida de millones de personas, Von der Leyen recordó que una nueva ampliación no será “un camino fácil”.

Reiteró que las adhesiones se basarán en el mérito y la Comisión siempre defenderá este principio, y que se necesitará trabajo duro y liderazgo para hacer realidad la ampliación, aunque reconoció que ya se han producido muchos progresos para hacerla realidad.

Citó concretamente “los grandes avances que Ucrania ya ha logrado” desde que se le concedió el estatus de país candidato. “Y hemos visto la determinación de otros países candidatos a realizar reformas”, dijo para proclamar: “Ha llegado el momento de que igualemos esa determinación. Y eso significa pensar en cómo prepararnos para una Unión completa. Necesitamos superar los viejos debates binarios sobre la ampliación. No se trata de profundizar la integración o ampliar la Unión. Podemos y debemos hacer ambas cosas. Para darnos el peso geopolítico y la capacidad de actuar”.

En su opinión, “la próxima ampliación también debe ser un catalizador del progreso. Y el Parlamento Europeo siempre ha sido uno de los principales impulsores de la integración europea”.

La presidenta de la Comisión dijo que siempre apoyará a la Cámara y a todos aquellos que quieran reformar la UE para que funcione mejor para los ciudadanos.

Incluso, la política alemana se mostró dispuesta a hacer cambios mediante una Convención y un Tratado Europeos “cuando sea necesario y donde sea necesario”, aunque defendió que la UE no puede, ni debe, precisó, “esperar a que el cambio del Tratado avance con la ampliación.”

Porque está convencida, y así lo verbalizó, de que se puede lograr más rápidamente una Unión apta para la ampliación y para ello habrá que responder a preguntas pragmáticas sobre cómo funcionará en la práctica una UE de más de 30 países.

Pleno empleo y pacto migratorio

Además de la defensa cerrada de trabajar para completar la ampliación, la presidenta de la CE instó a cerrar el Pacto Migratorio en el que lleva tiempo trabajando la UE. “El acuerdo sobre este pacto nunca ha estado tan cerca”, dijo Von der Leyen, que insistió en que el “Parlamento y el Consejo tienen una oportunidad histórica de superarlo”.

Por ello instó a los eurodiputados: “Demostremos que Europa puede gestionar la migración con eficacia y compasión”.

La presidenta de la Comisión hizo este llamamiento porque Europa necesita más trabajadores.  “Europa está cerca del pleno empleo. En vez de millones de personas buscando empleo, millones de empleos están buscando gente", afirmó.Von der Leyen advirtió de que la escasez de mano de obra y capacidades adecuadas para los puestos de trabajo “está alcanzando niveles récord” en la UE y “en todas las principales economías”.

“En plena temporada turística, los restaurantes y bares en Europa están reduciendo sus horarios porque no pueden encontrar el personal que necesitan”, dijo y prosiguió: “Los hospitales están posponiendo tratamientos por falta de enfermeras y doctores”. Es algo que afecta, en realidad, a todos los sectores, porque recordó que “dos tercios de las empresas europeas buscan especialistas en tecnología de la información”.

Esa necesidad de fuerza laboral, además, la puso en conexión con otros problemas sociales, porque dijo que millones de padres –“en su mayoría madres”, precisó– "tienen problemas para conciliar trabajo y familia porque no hay servicios de cuidado de niños adecuados".“Y ocho millones de jóvenes”, continuó, “no están ni trabajando, ni estudiando ni formándose para trabajar”, algo que consideró que es “uno de los obstáculos más importantes para nuestra competitividad”.

Von der Leyen considera que la escasez de mano de obra “entorpece la capacidad de innovación, crecimiento y prosperidad”, por lo que instó a “mejorar el acceso al mercado laboral”, en particular, “para los jóvenes y las mujeres”.