La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El desgarro de la muerte en el Parlamento de Andalucía
Cociéndose a fuego lento y con la tropa en Yanquilandia, los días y las horas cabalgan con los deberes encarrilados, sólo encarrilados, que el toro de la verdad está ahí mismo. Enjaretada la parte de atrás, quizá sea la línea encargada de atacar la preocupación mayor en este tiempo de Betis y rosas. A ver qué falta para que Bakambu esté para jugar es la incógnita que corroe los adentros en busca de una solución adecuada.
Sin Borja Iglesias ni Willian José, el papel de Chimy Ávila se antoja más esencial de cuanto prometen sus prestaciones mientras que se antojan muy necesarias las que Juanmi pueda volver a aportar. El gol se paga caro, preocupa la deriva que pueda tomar la situación del muy revalorizado Ayoze y se ve con alegría cómo Assane ha vuelto al escaparate con su aparición estelar en el Europeo Sub19, como también se ve con optimismo el papel que pueda recitar Jesús Rodríguez.
Pero estamos hablando de palabras mayores con el pistoletazo de salida en ese todo o nada que decidirá si hay Conference o no para la tropa verde, blanca y verde. Aquella irrupción de Asane en Los Cármenes se ha recordado ahora con su intervención en la consecución del título continental de los de su edad. Y para el ataque cuenta también Abde, pero se halla en plena participación en los Juegos Olímpicos también y con algún que otro aspirante a pedir su mano.
Es un verano más, otro que se va yendo con más rumores que realidades, pero la verdad es que el Betis no llegó a más el pasado curso por la falta de gol. Sin gol no hay tu tía y ya se pasan los días bajo la preocupante noticia de la falta de noticias en este apartado. Rumorología por las nubes y una preocupación que aumenta según se acerca la hora de la verdad. Desconociéndose cuándo estará utilizable Bakambu, la necesidad de encontrar un goleador es ya una pesadilla.
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