FERIA Toros en Sevilla hoy | Manuel Jesús 'El Cid', Daniel Luque y Emilio de Justo en la Maestranza

La Iglesia Católica está siempre sometida a toda clase de críticas y también, cómo no, en los tiempos del coronavirus. Así, cuando ofrece su opinión con respecto a determinados aspectos relacionados con la enfermedad que nos diezma, es debido a que pretende un protagonismo que no le corresponde en la sociedad actual; si la omite, es una muestra de su cada vez menor influencia social.

La Iglesia en la presente pandemia, más que hablar, actúa como sabe hacerlo, recurriendo a la oración, pero también actúa en los hospitales, en los geriátricos y otros centros de carácter asistencial. Una entrega que se ha manifestado con el fallecimiento de una veintena de religiosos españoles debido al Covid-19.

Asimismo, muchos sacerdotes han bendecido, diariamente, con el Santísimo, la localidad donde desempeñan su labor pastoral con oraciones de gran emotividad. La mayoría de los medios de comunicación social no han considerado conveniente divulgar la actuación de la Iglesia con respecto a la plaga del coronavirus, pero en situaciones de emergencia, como la actual, es aún más necesaria la mediación de la Iglesia para pedir a Dios que cese tan letal enfermedad. La Iglesia debe estar en medio del mundo, pues es uno de los mandatos de su fundador, aunque algunos desearían tener una Iglesia perennemente confinada, domesticada e incluso anulada. 

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