La Junta ha recurrido ante el Tribunal Supremo la sentencia del TSJA que anula la resolución de la Consejería de Medio Ambiente que, en 2015, autorizó a que la planta de Cementos Portland Valderrivas -junto a la A-92, en Alcalá de Guadaíra- usase derivados de residuos no peligrosos como combustible. La Junta había estimado sólo parcialmente las alegaciones de la organización Al Wadi-Ira.

Como recordó a Europa Press Juan José Carmona, abogado de Ecologistas en Acción, la sentencia impugnada en casación daba la razón a Al Wadi-Ira y consideraba "viciado el procedimiento de autorización" aprobado. La cementera solicitó a la Junta una modificación de la Autorización Ambiental Unificada (AAI) que tenía desde 2006 para poder usar residuos como combustible, un sistema que, según defiende la empresa, tiene todas las garantías y han incorporado otras plantas similares. No obstante, también se opone al proyecto el Ayuntamiento de Alcalá, que modificó el PGOU para no permitir esos combustibles a menos de 2.000 metros de zonas urbanas, aunque la empresa lo ha recurrido. En el fallo del TSJA se destacaba que la cementera no había pedido el informe de compatibilidad urbanística, ni la Junta se lo había reclamado, pese a que lo cree preceptivo y vinculante.