El gobierno socialista de la Diputación ha aprobado este jueves de forma inicial los presupuestos para 2020, por más de 469 millones (incluidas las cantidades para sociedades y organismos), que suponen un 3,55% más que este año. Aunque de nuevo y a pesar de que hay 300 millones de euros en depósitos bancarios y un nivel de endeudamiento del 16% frente al 75% permitido, la ley de estabilidad presupuestaria y el techo de gasto harán que más de 63 millones no puedan gastarse libremente. El gasto no financiero se reduce así a 302 millones. 

Como novedades y de acuerdo con lo anunciado por Fernando Rodríguez Villalobos en la investidura recogen la creación de tres oficinas, centradas en la lucha contra la despoblación, la brecha digital y la 105 (de orientación y asesoramiento a alcaldes), que sin embargo han centrado parte de las críticas de la oposición: por su escaso presupuesto (para las dos primeras, se han consignado 60.000 euros en cada caso) que harán que la mayor parte vaya al personal directivo y a estudios o porque, en el caso de Cs, se cree que conllevarán más duplicidades.  

También ha habido coincidencias en tachar las cuentas de continuistas. Finalmente, han recibido el voto en contra de Cs, Adelante y el PP y la sorprendente abstención de Vox, cuyo diputado, Rafael García Ortiz, no ha intervenido en el debate para explicar el sentido de su voto. 

El PP, a través de María Eugenia Moreno, ha censurado que el PSOE haya rechazado todas y cada una de las siete enmiendas, por 4,5 millones, que había presentado. Ha sido el único grupo en hacerlo. 

La diputada de Hacienda ha rechazado el "cheque-bebé" para luchar contra la despoblación: hacen falta servicios, que la Junta está recortando, ha dicho.

Destacaba la idea de implantar un cheque-bebé (2.000 euros por nacimiento en municipios menores de 5.000 habitantes); el aumento de las partidas de los programas estatales contra la despoblación que se han captado (325.000 euros más para ayudas al autoempleo; 800.000 para acciones formativas y de asesoramiento a jóvenes); para rehabilitar y adaptar viviendas rurales y caminos y senderos (750.000 euros) y, dado que se apunta a otra desaceleración económica, aumentar en dos millones (hasta un total de siete) el Plan de Urgencia Municipal, para que los ayuntamientos hagan contratos temporales a personas que riesgo de exclusión. 

La diputada de Hacienda, María Regla Martínez, ha considerado que el cheque-bebé no es la solución a la despoblación, aunque ella misma se benefició cuando fue madre en la etapa del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, sino tener servicios, como sanidad y la educación, que el PP está "recortando". En cuanto al resto, ha señalado que son modificaciones de programas que existen, lo que evidencia que son "buenos y que siguen mereciendo la pena". 

La diputada popular ha censurado la baja ejecución de las cuentas (en 2018,  fue del 78%, cinco puntos menos que en 2017), ha recordado que aumentan los fondos de la Junta, por la Ley de Dependencia y los programas europeos, pero siguen congelados los del Estado y ha incidido en que baja la inversión con respecto a 2019, con 100.000 euros menos, por ejemplo, para carreteras. 

Adelante ha propuesto que una mesa revise a mitad del mandato el grado de ejecución y participe en las modificaciones, pero se ha rechazado

María Izquierdo, de Adelante, ha repasado los datos que apuntan a otra crisis cuando todavía 53% de los servillanos en edad de trabajar están sin empleo o en precariedad y recordó la "receta de Alemania" de "gastar más" para que la economía se mueva. Por contra, destacó que en el presupuesto la inversión baja en un 3,43%; las partidas para actividades de promoción social, en un 0,26% y los fondos para al empleo no aumentan de forma acorde con el "drama". En parte, por las "políticas austericidas" que el PP y el PSOE asumieron al modificar el artículo 135 de la Constitución, favoreciendo este "contexto endiablado" que ha convertido a los alcaldes en "gerentes". 

Con todo, intentó dar un voto de confianza al PSOE al reclamar que, dado que el presupuesto va a tener modificaciones, a mitad de mandato se reúna a los grupos se informe cómo van y se puedan hacer propuestas. No hubo respuesta del PSOE y el voto de Adelante fue negativo. 

El portavoz de Cs, Manuel Benjumea, calificó los presupuestos de irreales e ineficaces, en tanto que carecen de "mirada crítica" y de análisis del contexto económico que se avecina, para adaptarse a la futura recesión económica. También los tachó de "irracionales" y arremetió duramente contra la "administración paralela", los "chiriguitos políticos", la "duplicidad endémica de la Diputación" que aumenta con las nuevas oficinas. "Pocas soluciones, grandes sueldos", ha resumido. 

Frente a las críticas, la diputada de Hacienda calificó el presupuesto de "ambicioso" en su apuesta por el empleo y las inversiones locales, destacó el que se apruebe "pronto", algo clave para los ayuntamientos, a los que se refuerza con un aumento del 3,85% (216 millones en total) de transferencias, la mitad para gasto corriente e inversiones y el resto para sanear y liquidar deudas gracias a los FEAR. Igualmente, se refirió a la apuesta por el gasto social. 

Reforzando sus palabras, el portavoz socialista Antonio Conde, ha aseverado que los presupuestos son "los más expansivos posibles".  Villalobos cerró el Pleno extraordinario recordando que muchos de los programas que ha puesto en marcha la Diputación de Sevilla han sido copiados e implantados después en otras. "Las políticas de esta casa son de referencia". "Decir que esto es un desastre..., es porque no lo conocéis o porque el discurso responde a otros motivos", ha apostillado.