Dos camiones y tres palas retroexcavadoras destinadas a retirar la basura acumulada en El Coronil desde la huelga iniciada el pasado 8 de enero tuvieron que dar marcha atrás por la acción primero de un piquete de miembros del Sindicato Andaluz de Trabajadores, encabezado por el ex alcalde de la localidad, Diego Cañamero, y después por una manifestación convocada a 800 metros del casco urbano.

El dispositivo de la empresa pública de Transformación Agraria (Tragsa) intentaba hacer cumplir la última resolución de la Consejería de Salud y Bienestar Social que ha declarado nuevas situaciones de "riesgo sanitario" en El Coronil. La Consejería de Salud, como ya hiciera en días anteriores, declaró situaciones de "riesgo sanitario" en varios puntos de la localidad como la Vereda de Arcos, la calle Torbis, la calle del Bosque junto a la calle Industria y un punto de recogida de basura próximo a lugares vulnerables como una residencia de ancianos y un almacén municipal.

El alcalde de El Coronil, el socialista Jerónimo Guerrero, ha denunciado estas acciones y los problemas de limpieza urbana, con bolsas de basura que no sólo invaden la vía pública, sino que dificultan la circulación de vehículos e impiden el paso de peatones. Han empezado a aparecer, según informa Europa Press, bolsas roídas "por lo que pueden ser roedores".

Para proteger la actuación de los camiones y las palas retroexcavadoras, se desplegó un efectivo de entre 50 y 60 guardias civiles, "pero ellos dijeron que en la manifestación había muchos niños y mujeres y que no tenían medios para garantizar la seguridad", ha señalado Guerrero reclamando explicaciones a la subdelegación del Gobierno en la persona de Felisa Panadero. "Los camiones tienen que volver", dijo el alcalde, recordando las advertencias de riesgo sanitario de la Secretaría General de Salud Pública, Inclusión Social y Calidad de Vida de la Junta.