El proyecto para demoler los bloques de la Casa Grande sigue adelante

El Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe ha iniciado los trámites para llegar a un acuerdo con los propietarios de once viviendas y otros siete locales, que no tienen derecho a realojo, en los bloques cuya demolición está prevista dentro del plan de reforma interior Casa Grande, aprobado de forma definitiva en octubre de 2007, en pleno centro urbano.

Según informaron fuentes municipales, la totalidad de las personas con derecho a realojo -algo más de 60- de estos pisos de la calle La Calleja están ya en nuevas viviendas del Ayuntamiento, en la Avenida de los Olmos. Pero todavía quedan estos 18 propietarios de pisos y locales comerciales, que no residían en la zona pero que están afectados por un expediente de "justiprecio" iniciado por resolución de Alcaldía, el pasado 4 de febrero.

Para evitar que se produjeran ocupaciones ilegales y actos de vandalismo en los bloques, la totalidad de los cuales ya están vacíos, hace meses que la Delegación Municipal de Urbanismo, junto a la Policía Local, procedieron a tapiarlos, aunque no hay riesgos en la estructura.

La reforma de esta zona del centro de Mairena del Aljarafe es uno de los proyectos urbanísticos más importantes en el casco histórico, del que se viene hablando desde hace décadas, en el entorno de la iglesia de San Ildefonso. No obstante, su ejecución está condicionada ahora por la disponibilidad presupuestaria en el Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe que, como tantos otros, pasa por importantes estrecheces económicas. No obstante, fuentes del gobierno local de Ricardo Tarno (PP), que ha asumido un proyecto iniciado por el anterior gobierno socaialista, insistieron en que se sigue adelante y en que en ningún momento se han parado unos trámites siempre complejos y farragosos cuando se trata de realojos o expedientes de expropiación.

La Unidad de Ejecución denominada AUSU-12 Casa Grande, incluida en el PGOU de Mairena del Aljarafe, prevé la demolición de estos bloques de pisos, entre otras construcciones, que son un parche en un centro urbano caracterizado por casas bajas, para crear una gran plaza con un aparcamiento subterráneo y 30 viviendas, con locales comerciales. En la zona, también hay prevista una nueva calle peatonal.

Los bloques se alzan precisamente en el solar de la que fuera la "casa grande", la casa palacio que los Álvarez de Toledo -familia a la que le correspondió el asentamiento mairenero tras la reconquista cristiana del municipio por Fernando III- levantaron junto a la iglesia del pueblo. Por tanto y pese al desolador aspecto que presenta en la actualidad, la zona es el origen de Mairena del Aljarafe, que se quiere poner en valor con este proyecto de reurbanización.

Fuentes municiales precisaron que se quiere negociar y acordar con los propietarios de viviendas y locales que no tienen derecho a realojo un precio por los inmuebles para evitar acudir a la expropiación. No obstante, algunos de los afectados no han podido ser localizados todavía.