Un reducto de vida salvaje

A escasos kilómetros de la capital hispalense existe un reducto de vida salvaje. Una reserva de fauna autóctona y exótica, auténtica selva, sabana o bosque encartados en el paisaje mediterráneo de la provincia de Sevilla. Un espacio único repleto de animales, moradores que aquí no son conocidos por su nombre científico, apenas se les identifica por la nomenclatura de su especie, todos tienen su apelativo. Zampo, Kenya, Rabón, Gina y un largo etcétera de nombres propios pueblan las más de 12 hectáreas de Mundo Park, en Guillena, un parque de fauna y flora al que también le gusta que le llamen por su nombre, y que no lo cataloguen como un zoológico al uso.

La puesta en funcionamiento de este espacio se produjo a principios del presente siglo, en el año 2001, si bien, el proyecto actual de conservación e investigación integrados en un parque faunístico se puso en marcha hace unos seis años, cuando Juan Luis Malpartida, y su fundación, se hicieron cargo de Mundo Park. Desde entonces, han implementado una filosofía que revela a las claras el concepto que los designa: "no somos un zoológico al uso, no queremos ser un lugar frío donde se muestran los animales como curiosidades de la naturaleza. No somos quien para juzgar o criticar ese modelo de exhibición de la fauna, pero sí somos dueños de nuestros actos y por ello huimos con toda libertad de esos conceptos". Esa es la convicción de Malpartida, director general de Mundo Park y presidente de la fundación que bajo su nombre lucha por la conservación y la investigación de fauna. Todas las especies que habitan en Mundo Park nacieron en cautividad, y dependen de forma total de sus cuidadores, garantes de su supervivencia.

Un grato paseo por sus caminos y senderos supone una auténtica aventura en la que un crisol de sonidos y visiones poco comunes a nuestro entorno nos deleitan. Aquí podemos disfrutar de hasta 150 especies diferentes de fauna y de exuberantes jardines y colecciones botánicas. Uno de los grandes atractivos de este espacio es el contacto directo con los animales. Muchos de los ejemplares que hoy en día viven en Mundo Park han realizado rodajes publicitarios, de cine y televisión, demostrando su hábito al contacto humano. "En nuestro centro se les da un trato familiar y cercano, especialmente a las muchas crías que nacen cada año en las instalaciones", añade el director de Mundo Park. Además de esta amplia colección zoológica, el visitante puede disfrutar de los vuelos de rapaces o de un atractivo espectáculo ecuestre, en la que los caballos muestran todo su esplendor en una carpa gigante, el Palacio de los Sueños.

Entre las muchas especies que pueden verse en este recinto, destaca el tigre blanco Stela, hembra de este felino albino que el pasado verano amplió su camada con nuevos nacimientos. Otros grandes felinos, Cerro y Zampo, son todo un reclamo para las visitas. "Un tigre y un león que juegan conmigo y con los que hago footing a diario", Argumenta el director del parque.

La educación ambiental es uno de los tres pilares que fundamenta la existencia de Mundo Park. "Le damos mucha importancia a este aspecto, principalmente a través de las visitas guiadas por las instalaciones, que es la forma más directa de enseñar y respetar el medio ambiente". El público que les visita tiene la posibilidad de acercarse a la naturaleza, a los animales, "que son ejemplares mansos que no están estresados y que buscan el contacto humano".

No obstante, las labores de esta institución y su fundación no se limitan a la educación ambiental. Confieren una importancia vital a la conservación y la investigación como elementos clave. Son los otros dos pilares, de tanta y tan vital importancia como el referido de educación ambiental. El grueso de las investigaciones desarrolladas versan sobre las condiciones de vida de las especies que se tienen en cautiverio, sus hábitos alimenticios, patrones de conducta o reproducción y comportamiento, entre otros. Actualmente, existen zoológicos que trabajan en coordinación con Universidades y Centros de Ciencia, otros realizan programas científicos de gran escala en las instalaciones y programas de investigación en campo.

Entre los distintos proyectos de investigación desarrollados, destacan dos iniciativas actuales destinadas a estudiar mejoras en la calidad de vida de especies que habitan en Guillena, una dirigida a rumiantes y a la evolución que pueden llegar a experimentar los parásitos intestinales según la dieta que les aporten y otra que valora la reacciones comportamentales de los jaguares.

La conservación es otro de los puntos clave de esta reserva animal. Bajo este concepto, trabajan para la reproducción, supervivencia e incluso recuperación de especies en peligro, y que acerca el concepto de zoológico a motivos conservacionistas y no como meros exhibidores de fauna. Uno de los logros en materia de conservación que más destacan los responsables de Mundo Park fue el éxito de conseguir reproducir una especie exterminada por el ser humana en su medio natural, Oryx Dammah, antílopes de gran tamaño de origen africano, y que fue domesticada en el Antiguo Egipto para la producción de carne de consumo humano.

Otro gran logro conservacionista ha sido la consecución de reproducción en tres especies de lémures habitantes del parque, animales en alto riesgo de extinción y que únicamente viven en libertad en la isla de Madagascar. Las labores de conservación de Mundo Park también conllevan una estrecha colaboración con el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, Seprona, y con diversos agentes medioambientales, acogiendo y cuidando en el parque animales abandonados que son encontrados por ellos.

Todas estas acciones, estructuradas en los tres pilares referidos, son las que hacen posible el funcionamiento de este prolífico centro de naturaleza viva, distribuido en siete zonas temáticas, todas con el denominador común de imbuirnos en un espacio ajeno a nuestro entorno y que se nos presenta para nuestros disfrute todos los días del año, incluidos festivos, entre las 10 :00 y las 18:00. Además, proponen visitas escolares, en las que además de recorridos guiados, ofrecen actividades añadidas que ayuden a potenciar y difundir buenos valores ecológicos entre los jóvenes asistentes.

"Es muy grande el esfuerzo que tenemos que hacer todos los meses para conseguir alimentar a tantos animales y mantener los puestos de trabajo. Es un parque que hace un favor a la conservación, la educación ambiental y la investigación, y que difunde estos valores positivos para las futuras generaciones", resume Juan Luis Malpartida, padre y alma máter de este espacio. "Estos animales son mis niños y niñas", puntualiza este hombre que conversa, juega e incluso besa a diario a todas esas bestias que lo idolatran.