¿Qué le pasa a tu cerebro cuando sonríes (sin ganas)?

Sonreír es un analgésico que cambia tu día. Si empezó mal, dibuja una sonrisa en tu mente o trata de recordar momentos maravillosos. Automáticamente se activa la región prefrontal izquierda del cerebro que es la parte que se encarga de las emociones "positivas" y esa sonrisa se dibujará en tu cara.

El doctor Fernando Marmolejo-Ramos, que es el principal autor de un estudio, descubrió que mover los músculos de la cara formando una sonrisa forzada podría ayudar a engañar a la mente, generando emociones más positivas y que esto podría mejorar la salud mental.

Asegura que "existe un fuerte vínculo entre la acción y la percepción, por lo que el sistema motor y el perceptivo estarían enlazados al procesar estímulos emocionales". Y añade que "si se puede engañar al cerebro de esta manera para que perciba los estímulos como felices, se podrá usar esta técnica para ayudar a mejorar la salud mental de las personas".

La mayoría de las personas esperan a tener un buen día o una época en la que se sientan felices para sonreír más, cuando debería ser al contrario. Según Marmolejo-Ramos: "La sonrisa tiene un poder enorme dentro de nuestra emocionalidad", por lo que si empiezas tu día sonriendo, tu interior cambia potencialmente, aumentando tus niveles de energía y proporcionándote muchos beneficios.

La sonrisa es un elemento de comunicación universal y es contagiosa, además de transmitir buenas sensaciones y confianza a las personas que tenemos cerca o a la persona con la que estamos hablando. ¿A quién no le gusta rodearse de gente positiva? O de gente "que suma". Son indiscutibles los efectos positivos que produce en el cerebro.

Efectos en el cerebro

La sonrisa libera endorfinas, dopaminas, serotonina y adrenalina que contribuyen a reducir el dolor físico, emocional y mejorar la salud porque cuando ríes o sonríes se activan el sistema neuroendocrino y el sistema inmunitario, se eleva el número de leucocitos y favorecen la plasticidad cerebral.

La Organización Mundial de la Salud afirma: "Más del 90% de las enfermedades tiene un origen psicosomático", por lo que, prosigue: "la manera en que cada uno se enfrenta a los conflictos, el estrés y las frustraciones puede favorecer, o no, el bienestar y la salud".

Sonreír espanta los miedos y ayuda a eliminar el estrés, oxigenando el cerebro y activándose el sistema límbico. ¿Sabías que todo ello facilita la función de la retención de memoria? Sonreír tiene tanto poder sobre la mente que las personas que lo hacen reducen las posibilidades de enfermar de Alzhéimer.

A la hora de sonreír, movemos entre 12 y 17 músculos, entre los que se encuentran el cigomático mayor y menor, los cuales han sido claves para el descubrimiento de que solo con moverlos voluntariamente, es decir, poniendo una sonrisa forzada y sin necesidad de que exista un estímulo concreto, se genera en nuestro cerebro una sensación positiva en nosotros y en los demás por las neuronas espejo.

¿Te ha pasado alguna vez que has tratado de contar algo divertido y lo has hecho entre risas y sin que hayas terminado de contarlo la otra persona ha terminado riendo contigo sin llegar a saber lo que ha pasado? Si quieres que alguien recuerde algo, hazle reír antes de contarlo ya que su cerebro estará más preparado para codificar, retener y recuperar esa información.