Tres módulos de la cárcel de Sevilla-I están actualmente aislados tras haberse detectado dos positivos de coronavirus entre la población interna, lo que ha obligado además a que, al menos, cinco funcionarios que tuvieron contacto con alguno de los reclusos estén guardando una cuarentena.

Según han confirmado a este periódico fuentes próximas a la prisión sevillana, en las últimas horas se han detectado dos casos positivos entre los internos de Sevilla-I, lo que ha llevado a la dirección del centro a acordar el aislamiento de tres módulos de presos preventivos.

En total se han confirmado hasta ahora dos casos positivos entre los internos, aunque la cifra podría aumentar puesto que se continúan haciendo pruebas para la detección de posibles contagiados. Al menos cinco funcionarios y una jefe de servicio están además en cuarentena por el contacto con alguno de los positivos, dijeron las mismas fuentes.

Los nuevos contagios se han detectado precisamente ahora que se había iniciado la campaña para inyectar la dosis de recuerdo de la vacuna de Janssen contra el Covid-19 a unos 750 internos de Sevilla-I, además de unos 65 funcionarios que trabajan en este centro penitenciario.

La Asociación Tu Abandono Me Puede Matar (TAMPM) ha informado en un comunicado que el pasado viernes, ante los evidentes síntomas de varios internos y la posibilidad de que estuvieran afectados por el Covid 19, se les realizaron pruebas que dieron como resultado el positivo de dos reclusos del módulo 3, que fue confinado. El sábado fueron los Módulos 2, con un caso, y el 5, con dos, los que tuvieron que ser confinados, aparte de un tercer positivo en el Módulo 3, según la asociación.

Igualmente, la asociación asegura en un comunicado que seis funcionarios, de momento, han dado positivo en las respectivas pruebas realizadas, y critica que "no se están llevando a cabo todas las medidas necesarias para que el virus no se siga extendiendo y proteger con ello la salud tanto de la población reclusa como del personal del establecimiento".

De hecho, señalan que con un módulo confinado y sospechas de más casos, "no se entiende que el sábado se celebrara un coloquio en el salón de actos de la unidad de cumplimiento, espacio con escasísima ventilación, a la que acudieron internos de cuatro módulos diferentes así como los funcionarios y demás personal encargado de su organización y, lógicamente, los invitados".

"Consideramos que se deben limitar las entradas y salidas del centro a aquéllas que sean estrictamente imprescindibles, como diligencias judiciales o sanitarios. Sin embargo, no está siendo así y, de hecho, hasta este momento, no se han suspendido los permisos ordinarios, cosa que creemos debe hacerse de inmediato", concluye TAMPM.