Se trata de un proyecto que se encuentra en estado embrionario, pero supone una de las principales iniciativas del gobierno local en el ámbito de los Edificios Municipales. El Ayuntamiento pretende acometer la renovación de los tres hornos de los que consta el cementerio de San Fernando para realizar las incineraciones. El alto volumen de éstas –con una media de 12 al día– requiere de constantes reparaciones, motivo por el cual se plantea su sustitución a corto y medio plazo, según indican fuentes municipales.

El crematorio del cementerio cuenta con tres hornos. El primero es de la marca Shelton y se instaló en 1986. Con él se comenzó a prestar este tipo de servicio en el camposanto sevillano, en una época en la que las incineraciones eran la fórmula menos habitual por la que se optaba cuando fallecía un ser querido. Esta tendencia empezó a cambiar la década siguiente, motivo por el cual en 1994 se instaló otro horno, de la misma marca.

Con la llegada del siglo XXI las cremaciones se pusieron por delante de las enterramientos tradicionales, hasta el punto de que hoy día casi duplican a las inhumaciones. Este cambio social obligó a disponer de un tercer horno, de la marca Lazar, que se puso en marcha en 2003. Es decir, el menos antiguo de los que posee el cementerio cumple 20 años.

Constantes averías

Durante estas décadas no han faltado numerosas averías que obligaron a muchos sevillanos a desplazarse a localidades del área metropolitana para incinerar los restos de los familiares fallecidos, lo que evitaba largos tiempos de espera.

Los datos aportados por el Ayuntamiento demuestran la evolución en las prácticas funerarias en la última década. En 2013 en el cementerio se llevaron a cabo 1.713 enterramientos. En 2022 esta cifra se redujo a 1.302. En lo que va de este ejercicio, se han contabilizado 953.

Respecto a las incineraciones, en 2013 llegaron a 3.204, cifra que se mantuvo prácticamente igual en 2022, con 3.192. Este año ya se han registrado 2.352.

El anuncio de renovación de los hornos crematorios coincide con la publicación de las nuevas tasas en el cementerio para 2024, que experimentarán un importante incremento. Así, por ejemplo, en el caso de las incineraciones de cadáveres el precio asciende de 189,97 euros a 283,45.