La Casa de Niños Expósitos, conocida como la Casa Cuna, ha logrado multiplicar por tres la edificabilidad tras aprobar la Gerencia de Urbanismo el estudio de detalle de la sede de la Fundación San Telmo. La superficie construida podrá pasar de los 8.732 metros cuadrados que existen en la actualidad a 26.800 metros cuadrados para levantar una residencia, un archivo para la documentación, zonas deportivas y ampliar la cafetería. Desde la institución indican que a medio plazo no están previstas ampliaciones de nueva planta que supongan una mayor ocupación de lo construido. Por ello, el estudio de detalle se refiere exclusivamente a las áreas de la parcela donde por su discreta ubicación puede complementarse lo edificado.

La máxima edificabilidad es el resultado del 80% de la superficie de la parcela por la altura máxima señalada en los planos de ordenación detallada, que al no estar recogida expresamente se considera de tres plantas de altura. Por lo tanto, la edificabilidad máxima sería de 26.130 metros cuadrados por 2,4, lo que da una cifra de 62.712 metros cuadrados. En el documento se apunta que “la localización de toda la edificabilidad es del todo incompatible con el mantenimiento de las áreas libres protegidas. Por ello y a pesar de que la normativa establece que el estudio de detalle debe distribuir toda la edificabilidad asignada a su ámbito, se distribuirá únicamente la necesaria para cubrir el desarrollo previsible durante la vigencia del actual Plan General, pudiendo ser objeto de revisión cuando se agote la prevista, cuando otro planeamiento superior modifique las condiciones urbanísticas aplicables, o por cualquier otro motivo que lo justifique”. La superficie edificada existente es de 8.732 metros cuadrados y la edificabilidad asignada para nuevos inmuebles es de 26.800 metros cuadrados, quedando como remanente 27.180 metros cuadrados.

Las nuevas superficies edificables. Fuente: Gerencia de Urbanismo.

En la actualidad, la totalidad de los edificios del conjunto han sido restaurados por la Fundación San Telmo a excepción del ala Oeste del inmueble principal en planta baja, cuya estructura está consolidada pero no se ha compartimentado ni puesto en uso. Por ello, la institución dispone de una reserva importante de superficie construida para hacer frente al natural crecimiento de los programas docentes.

Sin embargo, por las características tipológicas de estos edificios no ha sido posible construir un espacio de servicio y almacenaje con gran capacidad para el mantenimiento de los equipos propios de la actividad y de los espacios libres, y el archivo de documentación generado.

El Sureste de la parcela comprende un espacio libre con escasa vegetación y de forma triangular adosado a la medianera con el terreno colindante. Se trata de una zona de 900 metros cuadrados que no integra en su interior ninguna edificación y sí especies vegetales como tres melia azedarach y una wasingtonia Robusta. Las intervenciones podrán consistir en inmuebles de nueva planta con una edificabilidad máxima asignada de 1.600 metros cuadrados. La altura permitida es de dos plantas, con un total de nueve metros.

Al Este del conjunto de la Casa Cuna se localizan una plataforma sobre una antigua piscina en desuso y las vías de reparto de servicio. La actividad principal demanda la ampliación de superficie a la edificación de cafetería para su adecuación al aforo total del conjunto. Se trata de una zona de 600 metros cuadrados al Sureste de la parcela. No integra en su interior ninguna edificación y sí algunas especies vegetales nada singulares como dos cercis siliquastrum y cinco citrus Aurantium. Las intervenciones podrán consistir en edificaciones de nueva planta dentro del área de movimiento número dos, siendo la edificabilidad máxima asignada de 1.200 metros cuadrados y la altura permitida de dos plantas con un total de nueve metros.

La tercera y última zona afectada por el estudio de detalle cuenta con 6.000 metros cuadrados al Oeste del conjunto. No integra en su interior ninguna edificación y sí algunas especies vegetales como diecisiete citrus aurantium, treinta melias azedarach, un ailanthus altissima, un ligustrum ovalifolium, una catalpa, ocho ulmus, dos ficus carica y dos casingtonia robusta. La idea es que este área de movimiento albergue una residencia de participantes de programas y docentes, y espacios dedicados al esparcimiento deportivo de los usuarios de conjunto. La edificabilidad máxima asignada es de 24.000 metros cuadrados, mientras que la altura permitida es de cuatro plantas con un total de 17 metros.

El edificio de la antigua Casa Cuna es uno de los escasos ejemplos de la arquitectura historicista aislada de cierta escala que perduran en nuestra ciudad, correspondiente a un centro asistencial dispuesto inicialmente en la periferia urbana. Esta condición aislada permite entenderlo como un ejercicio de estilo, liberado de los habituales compromisos con la trama histórica del casco urbano. La claridad compositiva del edificio, su condición de conjunto integrado por edificación principal, pabellones, cerramiento de fachada y jardines, y su cuidada composición y ejecución, constituyen sus valores fundamentales.

Los edificios han sido restaurados por la institución excepto un ala del principal

La Casa de Niños Expósitos fue proyectada por Antonio Gómez Millán en 1.912. La obra terminó cuatro años más tarde. El arquitecto proyectó originalmente un conjunto de ocho edificios integrados en un parque. Por razones económicas solo se realizó parte de este proyecto. El edificio principal es similar tipológicamente a los modelos académicos de instituciones públicas, como los hospitales donde la capilla ocupa un lugar central y las salas se distribuyen con amplios pasillos alrededor de patios.

El edificio principal está construido alrededor de 1925 de gruesa fábrica de ladrillo visto, con detalles cuidadosos en cornisas y remates que preludian el desarrollo que esta industria iba a tener en los años posteriores. Tiene dos plantas de altura y cubierta de tejas sobre cerchas metálicas. Los edificios situados más al Norte son más recientes con estructuras mixtas de ladrillo y hormigón y paramentos enfoscados. Están dedicados en su mayor parte a aulas y despachos para la actividad académica. Todas estas construcciones se asientan siempre a un nivel de aproximadamente un metro sobre el terreno, para evitar que resulten afectadas por inundaciones. El edificio más reciente de este conjunto es una cocina construida en el año 2001 junto al comedor preexistente, ampliado en 2007.

La propiedad del conjunto edificado que cuenta con un grado de protección parcial 1 es de la Diputación de Sevilla, quien lo tiene cedido temporalmente a la Fundación San Telmo hasta 2040. La calificación del suelo actual es dotacional, equipamientos y servicios públicos (SIPS). La fundación desarrolla una importante labor de promoción de la cultura y de formación, perfeccionamiento y especialización, en el mundo de la empresa. Destacando la proyección internacional de su actividad.

Uno de los edificios de oficinas y aulas que hay en el complejo de la Casa Cuna.