La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a José M. S., alias el Choco, un conocido atracador del barrio de Torreblanca, por su presunta participación en el asalto al chalé de un joyero de El Puerto de Santa María (Cádiz) hace casi tres años. La operación la ha llevado a cabo el Grupo de Atracos de Sevilla, en colaboración con los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la comisaría de El Puerto.

El atraco ocurrió en la urbanización Valdelagrana la mañana del 18 de noviembre de 2016. Cuatro hombres entraron en la vivienda con la cara cubierta por un pasamontañas y las manos protegidas por guantes. En el interior del chalé se encontraban en ese momento el joyero y una empleada del hogar. Ambos fueron maniatadas mientras los asaltantes los amenazaban para conseguir la clave de una caja fuerte que había en la vivienda.

El joyero, presa de un ataque de nervios, no fue capaz de recordar la clave, lo que hizo que los delincuentes incrementaran sus amenazas. Finalmente, optaron por llevarse la caja fuerte entera. En el interior había joyas y objetos valorados en unos 50.000 euros. Luego, los delincuentes huyeron a bordo de un vehículo de alta gama.

En la casa quedaron maniatados el joyero y la empleada, y así fueron descubiertos por una persona del entorno del comerciante, que los liberó y llamó a la Policía. La UDEV inició una investigación de los hechos y ha ido deteniendo paulatinamente a los cuatro presuntos implicados.

El último de ellos, el Choco, fue detenido el 24 de junio en Sevilla. Los agentes del Grupo de Atracos localizaron al sospechoso en la capital andaluza y ejercieron de guías de sus compañeros de Cádiz para proceder a su detención.

El Choco, de 35 años, es un conocido atracador de Torreblanca. Tiene varias detenciones anteriores por tráfico de drogas, lesiones y también un homicidio en grado de tentativa, pero sobre todo se dedicaba a los atracos. En el año 2006 ya fue detenido por un delito contra la salud pública. Al año siguiente ya fue arrestado por extorsionar a un vecino de su mismo barrio, al que pedían dinero amenazándole con darle una paliza.

En diciembre de 2012 fue de nuevo detenido en Coria del Río por su implicación en un secuestro a un ciudadano marroquí. La víctima de la detención ilegal tenía una deuda de 16.000 euros por un asunto relacionado con el tráfico de drogas. Los secuestradores se hicieron pasar por policías, llevando hasta el uniforme reglamentario, y una pistola simulada que se les cayó en el lugar de los hechos.