La Policía cierra el Sopa de Ganso por incumplir la licencia otorgada

El mítico bar-restaurante Sopa de Ganso, en el entorno de la Alfalfa, podría verse abocado al cierre después de 27 años por un problema con la licencia, después de que la Policía Local precintase en la noche del pasado sábado este establecimiento por cuestiones de aforo y por "desarrollar una actividad que no le corresponde". En este sentido, hay que recordar que este local funciona como restaurante hasta una determinada hora en la que pasa a convertirse en bar de copas.

Así lo ha explicado a Europa Press el propietario de Sopa de Ganso, Luis Arévalo, quien apunta que el problema reside en que la licencia con la que cuenta este establecimiento, de "restaurante con ampliación de música", ya no se encuentra recogida entre las estipuladas por la Junta de Andalucía ni el Ayuntamiento, de modo que existe una "laguna legal" en este aspecto.

No obstante, el dueño asegura que en los últimos meses ha intentado "sin éxito" reunirse con el responsable municipal de Medio Ambiente para ver qué opciones tiene el establecimiento para continuar su actividad de forma reglada. Arévalo asegura que no se le ha ofrecido "ninguna opción" y que "la siguiente noticia que hemos tenido ha sido el precinto del bar".

El propietario de Sopa de Ganso ha avisado de que si el precinto no se levanta en las próximas dos semanas, se verá obligado a cerrar este bar que lleva en la ciudad desde 1986, ya que apunta que no tiene "capacidad económica" para abonar los 3.500 euros que paga de alquiler por este local en pleno casco histórico, así como impuestos y sueldo de cinco personas, con el bar cerrado.

Asimismo, ha indicado que, si llega a producirse esta situación, no dudará en "demandar al Ayuntamiento" y solicitarle una indemnización, puesto que el establecimiento ha tenido un comportamiento "ejemplar" durante todos los años que lleva abierto, "con todos los seguros pagados, que cumple el horario y que nunca ha dado problemas por venta de alcohol a menores, drogas o que se saquen vasos fuera", como asegura que sí ocurre en "otros locales".

Del mismo modo, el propietario teme que si se le ofrece la opción de mantener el local abierto tan sólo como bar de copas o como restaurante, la primera posibilidad sería "difícil" al encontrarse en una zona acústicamente saturada (ZAS).

Por su parte, la Delegación de Urbanismo y Medio Ambiente señaló a este periódico que el citado establecimiento acumula numerosas denuncias vecinales, la mayoría relacionadas con problemas de ruido, y que la Policía Local se ha "limitado" a ejecutar una resolución administrativa de dicha delegación. De igual forma, fuentes municipales afirmaron que el local tenía un precinto anterior, el cual no han respetado, así como superar el límite de aforo establecido. "En un restaurante los clientes han de estar sentados y en el Sopa de Ganso había personas de pie, debido a que también era bar de copas, un modelo mixto para el cual no existe actualmente ningún tipo de licencia ni por parte de la Junta ni por la del Ayuntamiento", señalaron la fuentes.