Recambios en Resolana

Miguel Carballedo Piñeiro, presidente de la ONCE, le presentó ayer a Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, al nuevo delegado territorial de la organización en Andalucía, Ceuta y Melilla, Cristóbal Martínez Fernández (Úbeda, 1968). Sucede a Patricio Cárceles, que ocupó el cargo los últimos doce años, tiene la medalla de Andalucía y el jueves tomó posesión de director general adjunto de Juegos ONCE.

Martínez Fernández, licenciado en Psicología, padre de cuatro hijos, pasó sus últimos diez años trabajando en la ONCE de Málaga. Ayer tomó posesión en la sede de Resolana junto al subdelegado, José Antonio Toledo (Jerez, 1966), que sustituye a Francisco Arroyo, nombrado director comercial de la organización.

El presidente de la ONCE ratificó a Ventura Pazos (Cádiz, 1959) de presidente del Consejo Territorial de ONCE Andalucía. Presidió el acto la consejera de Salud, Igualdad y Asuntos Sociales, María José Sánchez Rubio, que recordó que en Andalucía existen 700.000 personas con algún tipo de discapacidad.

En presencia de Manuel Gracia, presidente del Parlamento andaluz, y Fernando Rodríguez Villalobos, presidente de la Diputación Provincial, Carballeda Piñeiro denunció la competencia desleal que ha mermado los ingresos de la ONCE. "Antes competíamos con la Lotería del sábado y la Quiniela del domingo. Al país que más bares tiene llegaron las máquinas tragaperras; los bingos, los casinos, los juegos electrónicos y algo tremendo como el póker, que está arruinando la salud de muchos jóvenes y el bolsillo de muchas familias".

Hace quince años la ONCE recaudó, según su presidente, el equivalente a 2.400 millones de euros -la moneda era la peseta- y en el último ejercicio fueron 1.760 millones. "¿Por qué existe un juego ilegal que copia los productos de la ONCE y explota la imagen de los discapacitados?", se preguntó, para añadir que en los últimos siete años, en los que la crisis puso a España "a la cabeza de Europa en la destrucción de empleo, hemos sido capaces de crear 47.400 puestos de trabajo auditados, el 95% para personas con discapacidad".

Invitó a Susana Díaz a asistir en febrero a la puesta de largo en Andalucía de Ilunión y, sin dar nombres, dijo que "hay algún político emergente de los que surgen como mesías cuando el país se hunde que ha dicho que los discapacitados en España no pueden salir a la calle. Que se dé una vuelta por Marruecos, por Portugal, por Francia. Aquí salen a la calle, trabajan con dignidad y nos reconoce la sociedad". La mayoría de los veinte mil vendedores de la ONCE tienen discapacidades distintas a la ceguera.