Sara Casas lleva "toda la vida luchando". Tras perder la custodia de sus tres primeros hijos en el año 2008, ahora lucha por recuperar la de Emilio, un niño de 10 años que sufre una malformación cerebral que le provoca una parálisis, una enfermedad denominada polimicrogiria y el síndrome de Pierre Robin, que le afecta a la mandíbula. 

La lucha de esta mujer por la custodia de Emilio comenzó el 20 de agosto de 2020, cuando Sara Casas llevó al menor al hospital debido a una infección respiratoria. Según ella, "se le indicó unas gotas sedantes contraindicadas para niños con esos problemas. A las 48 horas dejó de respirar y no orinaba".

A raíz de este suceso, Casas apunta que el hospital empezó a investigarla por un posible caso de síndrome de Munchausen por poderes, una enfermedad mental en la que la persona que la padece inventa síntomas o los provoca en el niño al que cuida. 

El 28 de agosto de 2020 le retiraron la custodia del menor. Según explica Casas, esto se debió a que ella fue una niña tutelada, además de la sospecha de maltrato, que ella asegura que es falsa. 

En la actualidad, Casas añade que su situación ha cambiado, ya que trabaja como limpiadora en una empresa desde abril de este año y tiene a dos de sus hijas a su cargo, Vanesa, de 19 años, y Carmen, de 20. "Vanesa firmó la baja voluntaria en su residencia de Santiponce y se vino conmigo", apunta Sara Casas, explicando que su hija Vanesa "da más trabajo que Emilio", ya que según un informe del centro de valoración y orientación de Sevilla, la joven padece "un retraso mental moderado, alteración de la conducta, un trastorno disociativo y es psicógena". Su hija Carmen "se fue voluntariamente de su piso tutelado para vivir con ella" . 

Casas ve a su hijo Emilio, que ahora tiene 10 años, una vez a la semana durante diez minutos y bajo supervisión. La enfermedad del menor, según su madre, "está avanzando", por lo que demanda poder estar con su hijo "el tiempo que le quede". 

Después de que la Audiencia Provincial de Sevilla haya ratificado la situación de desamparo a Emilio y desestimado los recursos de apelación presentados por Sara Casas, ahora recurre al Tribunal Supremo para continuar con su lucha y recuperar la custodia del menor. 

Este periódico contactó con la Junta de Andalucía para ofrecer la versión de la administración sobre el caso del hijo de Sara Casas. La Junta no quiso dar ninguna información, alegando que había un menor en el caso. Fuentes de la Consejería de Asuntos Sociales apuntaron que "no se le retira la tutela de un hijo a una madre sólo por sus condiciones laborales".