El Ayuntamiento de Sevilla ha recogido la petición de la asamblea ciclista de Sevilla A Contramano de reabrir el servicio de bicicleta pública Sevici y está estudiando la posibilidad de volver a poner a disposición de los ciudadanos esta alternativa de movilidad no contaminante.

En París y Lyon los servicios se han mantenido abiertos, pero no en España

La entidad ciclista de la ciudad se dirigió hace una semana a la Oficina de la Bicicleta de la ciudad, dependiente de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento, para solicitar la reapertura de Sevici, el servicio de alquiler de bicis pública, y pedía además que fuera gratuito, como sucede ya en algunas ciudades francesas, como París o Lyon.

A Contramano ha declarado esta semana que espera que esta decisión municipal se dé cuanto antes y asegura ser “moderadamente optimistas respecto de la posible reapertura de Sevici, por lo que agradece a la Oficina de la Bicicleta sus gestiones”.

Sevici cerró al público hace un mes, el pasado 16 de marzo, con motivo de las medidas de seguridad decretadas por el Gobierno de España frente al coronavirus. Ese día informó a los usuarios por las redes sociales de que suspendía su actividad temporalmente hasta nuevo aviso.

La entidad ciclista A Contramano asegura que no hay por qué interrumpir este servicio porque la bicicleta puede cumplir un papel de primer orden en la movilidad urbana imprescindible durante el confinamiento, al ofrecer a las personas que carecen de vehículo propio un sistema de movilidad de uso individual para acceder a sus lugares de trabajo y realizar sus desplazamientos imprescindibles, cumpliendo así además las recomendaciones del Ministerio de Sanidad de desplazarse (cuando sea imprescindible) en modos activos (a pie o en bicicleta).

A Contramano lamenta que hayan cerrado de forma generalizada los servicios de bicicletas públicas en la mayoría de las ciudades españolas, “fruto de una concepción equivocada del papel que estos sistemas de transporte público individual y activo juegan en la movilidad urbana”.

En contra de esta tendencia general, la asamblea ciclista celebra que parece que el sentido común comienza a imponerse y algunos sistemas empiezan a abrir. El primero en abrir ha sido el sistema Bicibox del Área Metropolitana de Barcelona.

La asociación critica que este cierre de los servicios de bicis públicas de alquiler se ha dado sólo en España, mientras en París y Lyon seguían abiertos estos servicios. En la mayoría de las grandes ciudades españolas como Madrid, Barcelona, Valencia o Zaragoza, sí los cerraron y no por ninguna directriz del Gobierno, sino más bien a una consecuencia del “exceso de celo de algún funcionario incapaz de considerar la bicicleta como un medio de transporte”.