La Universidad de Sevilla admite que hay un exceso de turistas en el Rectorado

Estudiará la manera de buscar un “equilibrio” entre el espacio dedicado al estudio y las visitas a un edificio que es BIC.

Un grupo de turistas en la puerta del Rectorado de la Universidad de Sevilla.
Un grupo de turistas en la puerta del Rectorado de la Universidad de Sevilla. / Juan Carlos Vázquez

La difícil convivencia entre turistas y estudiantes en el Rectorado será abordada por la Universidad de Sevilla. La Hispalense creará un grupo de trabajo para mitigar las molestias que los turistas causan a los alumnos Filología y Geografía e Historia, cuyas facultades se encuentran en la Fábrica de Tabacos, uno de los edificios más relevantes de Sevilla, que desde 1959 cuenta con la declaración de Bien de Interés Cultural, con categoría de Monumento Histórico. La Universidad de Sevilla reacciona de este modo al reportaje publicado por este periódico el pasado 18 de octubre en el que los alumnos alertaban de las dificultades que el turismo causaba a su actividad cotidiana en las facultades.

La Fábrica de Tabacos es uno de los edificios que hay que visitar obligatoriamente en Sevilla. A mitad de camino entre el Parque de María Luisa y la Plaza de España, y el triángulo formado por el Alcázar, la Catedral y el Archivo de Indias, es una parada obligada.

Desde hace tiempo los estudiantes se están quejando de la invasión de los turistas. Como relataban en el reportaje publicado por este periódico, las principales quejan hacían referencia a las dificultades para poder transitar por las instalaciones, o cómo algunos foráneos habían accedido a zonas reservadas para el estudio, como las salas de lectura, incluso a algunas de las aulas. Este periódico comprobó in situ la enorme presencia de grupos guiados por los principales patios del edificio. Algunos profesores consultados confirmaron la gran presencia de turistas, pero aseguraron que no se había producido ninguna queja formal.

Desde la Universidad de Sevilla se expuso ayer a Europa Press que este es un asunto a estudiar, dada la necesidad de establecer un “equilibrio” entre las clases y la necesaria apertura de un edificio público, que es uno de los más nobles de la universidad española, al mismo tiempo que fue en su origen una de las construcciones industriales más importantes de las que se erigieron en Europa durante el siglo XVIII, ocupando un enorme rectángulo de 185 por 147 metros, el segundo mayor de España después de El Escorial, y con una construcción donde se aprecian influencias renacentistas, barrocas y neoclásicas.

La institución suele intentar avisar a los guías, pero es mucha gente la que visita todos los días el conjunto, con lo que el control se dificulta. Desde la Hispalense se ha avisado a los gestores turísticos y a su propio servicio de seguridad.

La propia universidad ofrece la posibilidad de conocer y visitar su propio patrimonio, sobre todo sus edificios más relevantes. En el caso de la Fábrica de Tabacos, los horarios propuestos son los viernes 09:30 a 12:30 y de 16:00 a 18:00, y los sábado, de 09:30 a 14:00.

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