La Plaza del Salvador es uno de los puntos estratégicos cada año en la víspera del Corpus Christi. Varios altares y mucho público se dan cita en la céntrica plaza. La tradición este año se mezcla con un altar nuevo. La Hermandad Sacramental de San Juan Bautista de San Juan Aznalfarache es la responsable de esta estructura de tres alturas que está presidida por la Virgen del Consuelo bajo el baldaquino de la Virgen de la Paz, patrona de la localidad aljarafeña.

David Salas, prioste segundo de la corporación, es uno de los organizadores de esta iniciativa con la que quieren conmemorar el 275 aniversario de las primeras reglas fundacionales, hito que se enmarca dentro del Año Santo Jubilar concedido por el Papa Francisco I. La composición expuesta en el Salvador incluye un Niño Jesús perteneciente al círculo de Martínez Montañés y dos reliquias. Una de San Enrique de Ossó y otra de San Gregorio Osetano. También contiene otros elementos cofradieros como faroles o respiraderos.

La corporación, ubicada en la parte baja de San Juan de Aznalfarache y que procesiona cada Sábado de Pasión, se muestra satisfecha con las primeras reacciones a este imponente altar. Salas explica sonriente que el público destaca "lo fino y elegante que está", lo cual agradece como uno de los responsable de los montajes de la hermandad.