El arroz estará aislado de la salinidad que trae el dragado
El sistema actual que usa el sector se basa en captaciones directas de agua del estuario
La Confederación aclara en su proyecto para el arroz del Bajo Guadalquivir que la modernización del riego es vital "para aislar al sector de los efectos de la salinidad estacional del río y mejorar el abastecimiento de agua de riego para la zona arrocera".
Pero el objetivo clave del plan es aislar estos cultivos del futuro dragado del río que promueve el Puerto de Sevilla para ganar más profundidad al canal de navegación del estuario, el tramo navegable del río que discurre entre Sevilla y la desembocadura en Cádiz.
El otro requisito clave del Ministerio de Medio Ambiente para autorizar el dragado es la protección de las márgenes de Doñana, un proyecto que el Puerto de Sevilla presentó hace meses a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, que es quien debe dar su visto bueno.
La Confederación cita tres ventajas de la obra de esta red de canales y tuberías que tendrán los arroceros. Por un lado recalca que supondrá una mejora de la garantía y la calidad del agua, "al optimizar las pérdidas y mejorará la calidad del agua entregada, ya que no estaría afectada por las mareas, incluso en situaciones de sequía".
La segunda ventaja es que se mejora la gestión del agua. "La distribución del agua dulce a través del canal permitirá reducir los desembalses que actualmente se realizan para controlar la salinidad del río en la zona de captación durante los periodos de riego". El ahorro de agua sería de 100 hectómetros cúbicos al año, es decir, el 70% del consumo de Emasesa y Aljarafesa juntos en un año.
La tercera ventaja que apunta la Confederación es una mejor eficiencia energética. "La solución propuesta elimina los bombeos de distribución de agua actuales situados en el río ya que la distribución se hace mediante gravedad. El ahorro energético anual sería de 10,5 millones de kilovatios por hora y un ahorro de 6,5 millones de kilos de dióxido de carbono (CO2) emitidos a la atmósfera.
El proyecto supondrá poner fin al sistema actual basado en captaciones directas al estuario que han repercutido negativamente en la producción anual del arroz.
Se mejora por tanto el abastecimiento de agua para un sector económico vital de la provincia de Sevilla que en los últimos años se ha visto afectado por el aumento de la salinidad de las aguas captadas mediante el sistema de riego actual en el río. La ejecución de este proyecto supone la mejora de la productividad de un sector económico clave.
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