La capacidad de la red aumenta un 40% tras el plan de choque por los apagones

"Podemos garantizar que, por la capacidad de la red, no va a haber problemas, aunque la luz puede irse por otros factores". Con estas palabras el director de Sevillana Endesa en Sevilla, Celestino Izquierdo, resumió ayer el estado de las instalaciones tras la inversión de 487,5 millones realizada entre 2004 y 2007 con el Plan Alborada, puesto en marcha tras los graves apagones del año 2003.

Estas actuaciones han hecho que la capacidad de la red de distribución en la provincia haya aumentado en un 40% y la calidad de la misma -que se mide por la duración de los cortes de suministro-, en un 53%. La capital ha pasado de tener más de tres horas de apagones en 2004 a 36 minutos en 2007, una cifra ya "difícil de reducir" y que la sitúa entre "las tres o cuatro ciudades con mejor servicio" del país.

En concreto, se han puesto en marcha 18 nuevas subestaciones, ampliado la potencia de otras muchas, se han tendido 1.320 kilómetros de nuevas líneas de media tensión y ampliado la capacidad de 270 kilómetros de alta. Además, se han instalado 2.000 centros de distribución y, lo que es esencial a la hora de dar una respuesta rápida en caso de avería y reparación: se han creado más de 430 puntos de telemando. El 40% de toda la inversión ha ido a parar a la capital, por el volumen de población y las necesidades, seguida del área metropolitana.

Pero Izquierdo -que estuvo acompañado del jefe de Explotación y Suministro de la compañía, Fernando Diz-Lois- destacó que se ha actuado en todos y cada uno de los territorios de la provincia, aunque en algunas zonas rurales, como la Sierra Sur y la Sierra Norte, los procesos se han dilatado más por el problema con las infraestructuras y los permisos medioambientales. En 2008 se invertirá otros cien millones, en otros 36 equipos de telemando, nuevas subestaciones en Tomares y Lebrija y en la ampliación de las de Santiponce y Dos Hermanas y nuevas líneas de alta y media tensión, como la que interconectará las subestaciones de Don Rodrigo, Los Palacios y Morón. Aunque no estaba prevista, también se está haciendo una nueva subestación en El Coronil, vinculada a una planta fotovoltaica y que se terminará en julio.

En lo que respecta a las puntas de consumo que, previsiblemente, volverán a producirse en breve, la compañía tiene en marcha un plan de verano, con una primera fase de inspección (termografías para detectar puntos calientes, inspecciones en helicópteros y limpieza, aunque la lluvia ha colaborado sustancialmente en este último aspecto) y otra de intervención en caso de alarma por averías, con 180 personas y 30 contratistas, con un protocolo de actuación, dispuestos.