La queja se palpa en el ambiente. La dificultad para obtener cita con el médico de familia sigue siendo el caballo de batalla de la Atención Primaria. La situación difiere según los centros de salud o las consultas, y, aunque, si bien es cierto que hay ciudadanos que pueden tener cita con su médico de familia en apenas dos días, la mayoría de casos a los que ha tenido acceso este medio dilatan la espera al menos una semana o no pueden solicitarla por no haber huecos en la agenda.

Una realidad que contrasta con las buenas perspectivas que recogen las medias que maneja el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Según los datos oficiales aportados a este periódico, con fecha del miércoles 11 de enero. En los centros de salud del Distrito Sevilla, es decir, en la capital, la demora se sitúa en 2,34 días para consulta presencial de Medicina de Familia y 2,89 días para la cita telefónica.

El sector acoge esta cifra con recelo porque la experiencia diaria de gran parte de los ambulatorios no coincide con ella. No obstante, al tratarse de una media, los sindicatos hablan de “medias engañosas”. “Hay pacientes que tardan diez, doce o hasta más de 14 días en recibir una cita”, ha insistido esta semana el presidente del Sindicato Médico Andaluz, Rafael Carrasco.

En cualquier caso, y según las numerosas averiguaciones hechas por este periódico, no es lo mismo vivir en un barrio en Sevilla capital, que vivir en un municipio alejado de la misma como es el caso de Lebrija donde la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública habla de retrasos de récord “de entre 20 y 30 días”, e incluso, “picos de más de 40”, en la obtención de citas médicas. Un problema que ha calado en la población y que llevó a un grupo de vecinos al encierro el centro de salud el pasado miércoles durante unas horas.