Una ciudad gris y carente de personalidad. La pérdida de policromía en las principales calles del centro, por mor de la sustitución del clásico adoquín de Gerena por el monocromático y plano de Quintana de la Serena (Badajoz), fue el hilo conductor de la ruta El color de las calles celebrada ayer con motivo de las jornadas Jane's walk. Su guía fue el arquitecto Javier Queraltó, concejal de Infraestructura y Equipamiento Urbano del Ayuntamiento de Sevilla entre 1979 y 1987. Queraltó, junto a otros destacados arquitectos y urbanistas, han enviado una carta al alcalde, Juan Espadas, en la que muestran su lamento por las últimas actuaciones realizadas en la vía pública y su preocupación por las que están por venir, como en la calle Mateos Gago.

"Desde hace año se está actuando sin una pauta coherente en la calles y plazas, lo que deriva en unos resultados muy dispares. Las decisiones sobre los proyectos se toman por distintos departamentos municipales con criterios exclusivamente de oportunidad o económicos y, a nivel político, con un curioso entendimiento de la participación ciudadana que se pronuncia sin conocer las normativas sobre pavimentos, arbolado, etcétera", señala Queraltó, quien reconoce que estas reurbanizaciones han aportado mejoras en materia de accesibilidad, pero con notables carencias y errores en los proyectos.

Ex concejales de Urbanismo alertan de la pérdida de identidad de la ciudad

Los firmantes del escrito enviado al alcalde, entre los que se encuentran Julián Sobrino, profesor del departamento de Composición Arquitectónica de la Universidad de Sevilla; Rafael Vioque, director del equipo redactor del Catálogo de Espacios Urbanos Protegidos del PGOU de Sevilla; Indalecio de la Lastra, coredactor de las Normas de Urbanización del PGOU de Sevilla, o los exconcejales de Urbanismo Víctor Pérez Escolano y Francisco Barrionuevo, censuran que en las última actuaciones tendentes a la peatonalización "están suponiendo una sustitución de la piedra de Gerena por un nuevo material de granito gris monocromo y, en otros casos, por asfalto".

Por ello, los firmantes, en aras de criterios de sostenibilidad y mantenimiento de la singularidad del paisaje urbano de Sevilla, reclaman información sobre el plan de obras de Emasesa y su sistema de gestión, "recogiendo las responsabilidades técnicas de la Gerencia de Urbanismo en la elaboración de los proyectos y la ejecución de las obras así como en la tramitación de los permisos, incluyendo el control de la Comisión de Patrimonio". También solicitan la aplicación del artículo 7. 2 (Pavimentos) de las Normas de Urbanización del PGOU "para reponer en todo caso el material de piedra existente incluso cuando se encuentre oculto bajo una capa de asfalto". Por último, piden la elaboración de una normativa más estricta de tipo prevención o cautelar que permita proteger el pavimento tradicional de la ciudad en las obras que se llevan a cabo tanto por el Ayuntamiento como por empresas públicas o privadas, "todo ello en tanto no se elabora un estudio integral a modo de plan especial de intervención en los espacios públicos del conjunto histórico".