La rehabilitación del convento de Madre de Dios de la Piedad, en la calle San José, comenzará tras la Semana Santa y, en su primera fase, durará seis meses, aproximadamente. El Ayuntamiento y la comunidad de religiosas dominicas han firmado esta mañana un convenio de colaboración por el que la Gerencia de Urbanismo abonará 100.000 euros de los 237.000 necesarios en esta actuación de urgencia. 

El alcalde Juan Espadas, ha estado visitando esta mañana el histórico cenobio de la calle San José, un edificio de una gran importancia artística e histórica. Las monjas, actualmente hay nueve, han agradecido emocionadas la primera visita que reciben de un alcalde y se han mostrado encantadas por la implicación del Consistorio para salvar de la ruina al monasterio. "Esto es muy importante para nosotras. Es sólo el comienzo, hay que seguir rezando", le ha espetado sor Adela a Espadas. "Yo voy a venir todas las tardes a rezar con ustedes", le ha respondido el alcalde.

La primera fase de la rehabilitación, cuyo coste total está estimado en un millón de euros, consistirá en reparar la armadura de madera, original de 1564, que con problemas de pudrición de sus elementos portantes ha dado ligar a empujes y desplazamientos que motivaron una serie de desprendimientos que llevaron al cierre de la iglesia en 2014. "Esta armadura es la que soporta el peso de la bóveda. No es decorativa", ha explicado el arquitecto. También se va a apuntalar la zona del coro bajo, que cuenta con algunas vigas fracturadas. 

Otro problema importante de la iglesia es el desplome de 44 centímetros que tiene la fachada que da a la calle San José. Este problema está controlado mediante un sistema de alta precisión y se solventará en otra fase.

La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico aprobó hace unas semanas el proyecto básico, adelantado por este periódico, y el arquitecto está actualmente redactando el proyecto de ejecución, que también incluirá algunas actuaciones en la Casa del Capellán sus zonas aledañas, donde la comunidad tiene intención de realizar una hospedería. Este documento estará terminado en enero y saldrá a licitación. La obra comenzará tras la Semana Santa, ya que hay que montar andamios en la fachada y por allí discurren varias cofradías.

Estado de la Casa del Capellán.

Sor Adela, anterior priora del convento, ha sido la encargada de intervenir tras la firma del convenio: "Poco a poco hemos visto el deterioro de la iglesia hasta que hace cuatro años tuvimos que cerrarla, cercenando con ello nuestra vida monástica. En medio de esta oscuridad Dios nos pone hoy una luz. Y es significativo que este acto se celebre en adviento, tiempo de luz y esperanza". 

La religiosa ha realizado un llamamiento para que se impliquen otras administraciones, instituciones y personas particulares, en la recuperación integral de este convento histórico, que acogía a Isabel la Católica cuando visitaba la ciudad: "Este acto es como poner una nueva piedra en la iglesia. Es difícil comprender un convento sin su iglesia. Cuente señor alcalde con nuestras oraciones para usted, su familia y por su responsabiliad de gobierno". 

La armadura sobre la que se va a actuar en una primera fase.

Por su parte, Espadas ha resaltado las importantes intervenciones que se han acometido este año para recuperar el patrimonio de la ciudad, como la futura de la iglesia del convento de Santa Clara, o la Capillita de San José, y ha destacado especialmente el caso de los conventos por su relevancia artística e histórica: "Somos vigilantes y custodios del patrimonio de la ciudad, sea privado o público. Este convenio servirá para acometer las actuaciones de urgencia. Es el primer paso para acabar la faena".

Grietas en el arco toral del presbiterio.

En la firma del convenio, rubricada por Antonio Muñoz, delegado de Urbanismo; y sor Patricia, priora del convento, también ha estado presente Miguel Bermudo, presidente de la comisión permanente del Real Patronato de la Vivienda, institución sin ánimo de lucro que también colabora en la actuación. No ha podido estar Pablo Longoria, representante en España de la World Monuments Fund, entidad que también aporta una gran cantidad y que ya ha colaborado en la recuperación de otras joyas patrimoniales de conventos de la ciudad.