Con un divertido y escuetísimo tuit, el emoticono de un huevo, anunciaba al filo de las cuatro de la tarde de ayer la cuenta oficial del Sevilla la contratación de Marcos Acuña como nuevo lateral izquierdo de la primera plantilla. Luego, el Huevo, como lo conocen en Argentina, colgó un tuit: “Gracias @SevillaFC por confiar en mí. Muy contento por este nuevo desafío. ¡Vamos con todo!”.

El argentino, que el próximo 28 de octubre cumplirá 29 años, es el quinto refuerzo del actual campeón de la Europa League, tras pagar las opciones de compra de Suso y Bono y acordar los traspasos de Rakitic y Óscar Rodríguez con Barcelona y Real Madrid, respectivamente. Diez millones de euros, más dos en variables, abona el Sevilla al Sporting de Portugal por el internacional albiceleste.

Acuña ha estampado su firma en un contrato que lo vincula al club de Nervión por cuatro temporadas, hasta el 30 de junio de 2024. Tras soltar el bolígrafo, posó con José Castro, Monchi y José María del Nido Carrasco para la foto protocolaria. Y el defensa allá que se fue rumbo a la localidad de Algorfa, Alicante, para ponerse a disposición de Julen Lopetegui cuanto antes. La presentación telemática a la prensa ya llegará. Lo primero es embarcar en el proyecto deportivo 2020-21.

El preparador vasco pidió expresamente al Sevilla que solventara a la mayor brevedad esa plaza vacante que dejaba Sergio Reguilón, quien, por cierto, acerca su futuro a Manchester. Según The Guardian, el United se ha decidido definitivamente por el madrileño para reforzar un puesto, el de lateral izquierdo, donde los Diablos Rojos flaquean. El Madrid exige 30 millones de euros de salida, según el medio inglés, pero el Manchester espera cerrarlo en unos 25, después de seducir al jugador con unos 5 millones de euros anuales de ficha. El cabo suelto de la operación estriba en la opción de recompra, que el Madrid quiere sacar a toda costa y de la que aún es reticente el opulento club inglés.

En el Sevilla estaban resignados a olvidarse de Reguilón desde hace semanas. Y mientras, Lopetegui deseaba preparar la gran cita en Budapest del próximo jueves 24 sin la distracción de ese incierto hueco en el lado siniestro de la zaga. Desde hoy, durante el trabajo en Algorfa, y quién sabe si en el partido amistoso del próximo viernes ante el Athletic Club en San Pedro del Pinatar, el entrenador evaluará el estado de forma de Acuña, la asimilación de sus conceptos tácticos y su ensamblaje en el equipo, para calibrar si el ex jugador del Sporting de Portugal va a dar más que Escudero en la final de la Supercopa de Europa ante el Bayern Múnich.

En la concentración sevillista no quieren mirar aún a la Liga. Van con todo a por otro título, el octavo continental. Y cuando la final en tierras húngaras acabe, enfocar ya al Carranza, donde aguardará el Cádiz tres días después, el domingo 27.

Acuña, internacional absoluto con Argentina en 27 ocasiones, se formó en Ferro Carril Oeste. En la temporada 2014-15 recaló en el Racing de Avellaneda, donde se consolidó como un extremo, que no lateral, muy profundo, constante y con un excelente golpeo, tanto en centros como tiros.

En su última temporada en Racing, la 2016-17, Acuña despuntó con 25 partidos disputados de liga, nueve goles y 12 asistencias, lo que propició su salto a Europa al ficharlo el Sporting de Portugal para la campaña 2017-18.

En ella, el argentino debutó en la Liga de Campeones, disputó 31 partidos en el campeonato portugués, con cuatro goles y cinco asistencias, y levantó con el Sporting la Copa de la Liga.

En la 2018-19 llegó su consagración en Lisboa, pues, además de repetir título en la Copa de la Liga, ganó la Copa de Portugal junto al serbio Nemanja Gudelj, su nuevo compañero en el Sevilla, y jugó 30 partidos del campeonato liguero con un gol y nueve asistencias.

La pasada campaña, Marcos Acuña volvió a ser un fijo para el conjunto del José Alvalade y completó 24 partidos de la Liga NOS, con dos dianas y una asistencia, además de jugar la Liga Europa. Con la selección albiceleste, ha disputado las fases finales del Mundial de Rusia 2018 y la Copa América de 2019 en Brasil.