Kike Salas filtró supuestamente alineaciones del Sevilla para engordar sus ganancias con las apuestas

Kike Salas parece estar metido en un lío cada vez más complicado por una chiquillada. El informe que la Policía Nacional ha elaborado tras el volcado de su teléfono móvil no sólo deja evidencias de que el jugador utilizó supuestamente de forma fraudulenta su participación en los partidos del Sevilla para obtener ganancias con las apuestas deportivas junto a dos amigos, sino que también filtró alineaciones de antemano para engordar esas ganancias, aunque el jugador insiste en su inocencia y en que se han tergiversado sus mensajes.

El Confidencial ha ampliado la información de este jueves sobre los mensajes de Kike Salas intercambió con sus amigos César G. y Kevin L., también investigados, entre los que se incluyen filtraciones sobre las alineaciones que el entrenador del Sevilla entonces, Quique Sánchez Flores, iba a presentar en los partidos. Concretamente, el moronenses adelanta el once del Sevilla en el partido ante Las Palmas, en el que además el equipo aún no estaba matemáticamente salvado. Ello, aparte del delito que supone en cuanto al fraude a las casas de apuestas, también vulnera el régimen interno de actuación del Sevilla, como desvelar un secreto de gran importancia a nivel deportivo para un equipo de fútbol como es la alineación para un determinado partido.

"Ocampos bade sergio yo adri Nema buba oli Isaac nesy (sic)", responde el sevillista en uno de los mensajes de Wathssap, siempre según El Confidencial, coincidiendo, efectivamente, con la alineación que Quique Sánchez Flores colocó en el estadio de Gran Canaria.

Lo mismo ocurrió, según el informe, con otros partidos del Sevilla en el final de la pasada campaña, ante el Villarreal, el Cádiz y el Athletic. La Policía entiende que este hecho es de especial gravedad, ya que coincide con una apuesta realizada por uno de sus amigos (César G.) en un establecimiento de Codere en Morón de la Frontera, en la que apuesta a que Kike Salas va a ser titular y va a ver una tarjeta amarilla. Evidentemente, los dos supuestos se acaban cumpliendo.

Además, el informe que maneja el Centro Nacional Policial por la Integridad en las Apuestas y el Deporte (Cenpida) también involucra al argentino Lucas Ocampos. El mismo amigo de Kike Salas, antes del partido Sevilla-Barcelona, realiza dos apuestas de 100 euros cada una en el centro Codere de Morón, una por una tarjeta al defensa y otra por otra tarjeta al extremo hoy en el Rayados de México. Estas dos mismas apuestas de repitieron, idénticas, según El Confidencial, en un centro online. Los dos fueron los únicos amonestados en dicho partido, siendo la amarilla del argentino en el minuto 93 y por protestar.

La Policía, actualmente, estima las ganancias de estas actuaciones en unos 9.000 euros en total. Ello, aunque no es una cantidad muy apreciable y puede conllevar una multa económica o incluso un acuerdo con las casas de apuestas estafadas, sí va a traer para el jugador consecuencias graves a nivel federativo, ya que tanto LaLiga y la RFEF están por la labor desde hace tiempo de erradicar y perseguir este tipo de actuaciones. La sanción a la que se enfrenta puede ser muy dura y puede llegar incluso a los 5 años de suspensión de su licencia federativa.