Difícil, esa es la palabra que podría definir esta temporada del club de Nervión. Los aficionados han mirado con vértigo cómo su equipo se mantenía durante varias jornadas entre los últimos puestos de La Liga. Pero, el Sevilla "nunca se rinde" y ha devuelto la ilusión a sus aficionados clasificándose para la final de su competición fetiche: la UEFA Europa League.

Todo por vivir una nueva final, o eso es lo que piensan muchos de los seguidores del Sevilla, quienes han vivido una auténtica odisea para ver jugar al club rojiblanco. Los vuelos directos, escasos y a unos precios desorbitados, han sido el principal obstáculo para llegar a Budapest. Algunos aficionados han llegado a pagar casi mil euros por volar a la capital húngara y otros han tenido que optar por quedarse en tierra, a pesar de tener ya la entrada. 

Coche, avión y tren: el 'triatlón' de muchos sevillistas para llegar al partido

La complicación para encontrar vuelos o, al menos, vuelos asequibles Sevilla-Budapest, ha obligado a los seguidores del Sevilla a buscar otras alternativas para poder asistir hoy a la que será la séptima final del equipo. 

De camino a Valencia desde Sevilla

Daniel Quesada es uno de los socios que ha tenido que improvisar, junto con su grupo de amigos, una forma de llegar a tiempo a la final del torneo. El día 30 de mayo, jornada previa al partido, todos cogieron el coche desde Sevilla hasta Valencia, y así comenzó lo que sería un largo camino hasta llegar a su destino. 

Avión con destino Viena

Viena fue su segunda parada, tras coger un avión a las 17:40 desde Valencia. Y ya entrada la noche, a eso de las 21:40, se subieron a un tren rumbo Budapest.

Estación de tren de Viena

Llegaron a las 00:00 y, curiosamente, en su salida para celebrar el fin de la "peregrinación" se encontraron al exfutbolista del Sevilla Coke Andújar. 

Daniel Bellido y sus amigos, junto a Coke Andújar en un local de Budapest.

"Hemos probado todos los medios de transporte", afirmaba Daniel en una de sus historias de Instagram, donde ha ido narrando todo el viaje. "El alto precio de los vuelos y la dificultad de salidas desde Sevilla complicaba el viaje pero no nos rendimos y buscamos otras alternativas; ha sido un largo viaje pero ha merecido la pena por apoyar al Sevilla en otra final europea", aseguran.

"Ha merecido la pena", o esa es la sensación que le ha quedado tanto a él como a sus compañeros de viaje, quienes tienen la ilusión de traerse una nueva copa a Sevilla.

El encuentro se disputará esta misma noche a las 21:00 en el Puskás Aréna, contra uno de los históricos del 'Calcio' italiano: la Roma.