Las circunstancias de inquietud general que han traído la situación general de inestabilidad, no sólo en lo económico, provocada por la pandemia de Covid-19, van a motivar cambios en la cantera del Sevilla, que va a ver reducido su presupuesto y que, también, va a eliminar equipos dentro de sus escalafones inferiores.

El club nervionense ha decidido que en la próxima temporada se inscribirán dos equipos menos, de categorías juvenil e infantil, para así tener más concentrado el talento. El juvenil C, que militaba en Segunda Andaluza (antigua Preferente), y el infantil C de Tercera Andaluza dejarán de competir en la temporada 2020-21.

Además, tras producirse nueve bajas en el Sevilla Atlético, la intención del club es rejuvenecer el filial con la aportación de jugadores que proceden del juvenil División de Honor y no realizar, a diferencia de otros años, incorporaciones. Salvo algún caso muy puntual, no van a llegar refuerzos de fuera para el equipo de Paco Gallardo y lo mismo ocurrirá con el Sevilla C de Tercera División que adiestra Lolo Rosano, en el que han salido varios jugadores y en el que la idea es que compitan varios futbolistas en edad juvenil.

La salida de estos futbolistas, sobre todo los 9 señalados del Sevilla Atlético (Lucho García, Amo, Javi Pérez, Chacartegui, Juanpe, Diego García, Pejiño, Diabaté y Pana), más varios del C, va a hacer que se reduzca considerablemente el presupuesto de la cantera, aproximadamente en un millón de euros, de los más o menos 6 que tenía la pasada temporada a unos 5 millones.

Además, aún tendrá el club que resolver la situación de los ojeadores de la cantera, una nómina de unos 10 ó 12 técnicos (scoutings y ex entrenadores) cuyos contratos finalizaron el 30 de junio y que están a la espera de que se resuelva la normativa federativa sobre asistencia a los partidos de fútbol base por el Covid-19.