En ocasiones, las relaciones de pareja se convierten en una cárcel de la que es muy complicado salir, ya sea porque nos tienen engañados o porque nos hacen sentir culpables cada vez que queremos ser nosotros mismos. En otras ocasiones, no es culpa de una sola persona, sino de las dos personas que componen la pareja, creando una dinámica tóxica para ambos.

En las parejas, muchas veces hay una persona que tiene la autoestima baja, la otra persona implicada en la pareja aprovecha eso para no tener nunca la culpa y decir que si ha ocurrido algún problema ha sido por cosa de la otra persona.

Este tipo de estrategias de manipulación normalmente suelen pasar factura a la relación, pero no siempre somos capaces de distinguirlas. Una de las técnicas más conocidas en este ámbito es el gaslighting o luz de gas, el cual es un fenómeno que cada vez está más extendido.

¿Qué es el 'gaslighting'?

El gaslighting o luz de gas es una estrategia de manipulación que suele producirse dentro de las relaciones sentimentales, aunque también puede darse dentro de otro tipo de relaciones como lo son las de amistad.

El objetivo de esta técnica es conseguir que la otra persona dude de lo que está  ocurriendo, de lo que ha dicho o incluso de lo que recuerda. Esta estrategia suele terminar en problemas de autoestima en la persona que se está viendo afectada por este tipo de técnicas. Cuando la persona en cuestión se da cuenta de lo que está ocurriendo, normalmente suele romper los vínculos que le unían a la persona que estaba haciendo la técnica de luz de gas.

Las etapas del 'gaslighting'

En este proceso suele darse una serie de etapas, las cuales son por las que pasa la persona que está sufriendo la manipulación.

Shock inicial

Cuando comienza la relación, la reacción de la persona afectada es sentir incredulidad de lo que está ocurriendo o no darse cuenta de lo que sucede. En muchos casos, es necesario que pase una gran cantidad de veces y de tiempo para que la víctima se de cuenta de lo que pasa.

Defensa ante el ataque

En la segunda etapa, la persona empieza a ser consciente en cierta medida de lo que ocurre y de la situación, por lo que busca la forma de defenderse de la misma. Esto hace, en muchas ocasiones, que la manipulación se intensifique con el objetivo de parar la defensa por parte de la víctima.

Indefensión aprendida

Por último, llega el punto en el que muchas personas asumen lo que hace el manipulador y creen que eso es lo correcto para ellos, ya que creen que es una persona que les hace bien. Esto suele terminar derivando en problemas de autoestima y confianza en sí mismos y también en otra serie de problemas anímicos que les provocan infelicidad.

¿Cómo es una persona que hace 'gaslighting'?

Normalmente, las personas que utilizan esta técnica suelen seguir un patrón de comportamiento, que nos permite identificarlas y saber cuando alejarnos de una persona que no nos hace bien.

1. No son congruentes con sus actos
2. Se apoyan siempre en mentiras
3. Desprecia a su pareja
4. Atacan constantemente a otros
5. Utilizan un doble vínculo
6. Cuestionan las capacidades básicas de la otra persona