Los vengadores era un soplo de modernidad británica en los televisores españoles a finales de los 60. Cuando triunfaban otras series emblemáticas de su tiempo como El fugitivo o Los intocables, reyes de las noches en blanco y negro y un solo canal, el personaje de bombín y traje impecable de Patrick Macnee, como John Steed, trasladaba a los espectadores el mundo de James Bond y agentes esculturales como Emma Peel, adelantada en más de un decenio a Los ángeles de Charlie.
La actriz que daba vida a la sexy Peel, Diana Rigg, ha fallecido este jueves a los 82 años. Su última aparición en la pantalla de casa fue en la superproducción Juego de tronos, de la HBO, como matriarca de los Tyrell. Rigg está unida sobre todo a su ficción de estilo pop. Con la revisión de los personajes de Los vengadores obtuvo un Batfa en el año 2000, reconocimiento de su labor en una serie adelantada a su tiempo.
“Era una persona amada y admirada de su profesión, una fuerza de la naturaleza que adoraba el trabajo con sus compañeros. Va a ser muy extrañada”, ha expresado su agente al anunciar su muerte.
Riogg también intervino, no podía ser de otra forma, en una de las películas de Bond, Al servicio de Su Majestad, en 1969. En 1990 recogió su primer Bafta por Mother Love y estuvo galardonada en nueve ocasiones al Emmy, levantándolo en 1997 por mejor actriz en la miniserie Rebecca.
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