Más de un cantante sevillano, si observaran la evolución de sus estilismos con los años, le debe a Inmaculada Casal un afortunado cambio en sus prendas y más de una chaqueta prestada de las que se vendían en la tienda de su madre. La que fuera presentadora de Contraportada, una amable y amigable presencia a la hora de comer en Canal Sur, ha podido presumir siempre de estilo y de buen gusto. Por eso, ya en 1990, cuando apenas aparecía en pantalla, la pareja de María del Monte elaboraba reportajes para las noticias de la autonómica (entonces ese espacio informativo se llamaba El Diario) con consejos para poner la mesa, comportarse en una fiesta e incluso desnudarse empezando por los calcetines, que para eso incluso hay que tener nociones de estética.

Inmaculada Casal en un acto de Nuevo Futuro en 2001 con la duquesa de Alba y Mari Pepa de la Serna

La sevillana Inmaculada Casal, y que nació en Barcelona en 1964, informó a diario de la Expo 92 y su impulso como cronista de sociedad vino en 1995 con la boda de la infanta Elena, el acontecimiento que hizo ver a las cadenas de televisión el interés y potencial de los contenidos que habitualmente recalaban sólo en las revistas del corazón.

Contraportada se incorporó a la parrilla de sobremesa de Canal Sur en 1997 como suplemento a las Noticias y a los Deportes. Un espacio de los servicios informativos, redacción a la que sigue ligada Inmaculada Casal como jefa de Sociedad  cuando fue nombrada por el anterior director de informativos, Álvaro Zancajo.

La panorámica sobre la vida social, es decir los famosos, la realeza, el mundo artístico y cultural en general, encajaba a la perfección con el carácter y gustos de esta sevillana que ilustraría la wikipedia para definir a sus paisanas y que se asomó por el Paseo de la Palmera cuando tenía 18 años.

El apretado plató de TVE

Inmaculada Casal en 'Andalucía Junta'

Por entonces, esta estudiante rubia a la que le era imposible pasar desapercibida allá donde fuera se incorporó a TVE Andalucía. En el centro territorial de Telesur su jovial aspecto (por entonces algo afectada, que las cámaras siempre imponen) le llevó a conducir un espacio vespertino para la Segunda Cadena: Andalucía Junta. Este formato sufragado por la Junta de Andalucía se encargaba de preconizar lo que iba a ser Canal Sur.

El origen de la costosa cadena autonómica nació en el ínfimo plató de la Palmera, apenas unos metros cuadrados donde el entrevistador se apretujaba con los entrevistados que es lo que tenía que encarar la esforzada Inmaculada con las figuras de toda índole que pasaron por este contenedor. En Andalucía Junta se repuso Curro Jiménez y había series de dibujos animados (muy mal dobladas por cierto) pero como sólo había dos cadenas se veía bastante.

La etapa de Canal Sur de Inmaculada Casal

La llegada de la cadena andaluza, que fue recibida con toques de campanario por aquella Andalucía donde el PSOE no veía ponerse el sol, coincidió con una Inmaculada Casal preparada para dar el salto al metas mayores. Pero en principio su plaza ganada fue en la radio donde su voz áspera, algo rota y grave, destacaba. La voz de la presentadora de Contraportada siempre ha sido un sello de distinción. Y lo que le ha gustado a su portadora, siempre, es distinguirse. Vale, destacar pero nunca dar la nota.

La discreción de estos 23 años de relación con María del Monte, con dos hijos de un anterior matrimonio con un empresario sevillano, son ejemplo de que se puede estar en primer plano de la profesión y mantener un tono menor en la vida privada. Es lo que consiguió durante todo este tiempo.

Ahora bien, el mérito también se encuentra en la cantante. Mantuvo a raya a los compañeros de profesión de su pareja para que se lo pensaran si querían traspasar esa línea. María sabe mantener su autoridad, hay que admitirlo, y ha sobrevivido a platós, entrevistas, 'tomateos' y hasta vídeos con Isabel Pantoja en bucle.

El encuentro de María del Monte e Inmaculada Casal, hispalenses sonrientes que se conocían desde mucho tiempo atrás, de niñas, fue en los primeros años de ese Contraportada que siempre estuvo sobre los dos dígitos, que ya quisieran muchos de esos rostros recurrentes de Canal Sur conseguirlo ahora.

El público andaluz fue fiel a la revista del corazón donde los personajes que aparecían en Qué me dices, como la duquesa de Alba o Rocío Jurado, aparecían caricaturizados. El espacio de sobremesa de Telecinco abrió caminos al tratamiento del ‘corazoneo’ y también daría ideas para su siguiente escalón, Aquí hay tomate.

Inmaculada Casal con los rostros masculinos de 'Contraportada', Sergio Morante, Carlos Telmo, José Pablo Ruiz...

Contraportada era otra cosa: conciertos, fiestas, moda flamenca. Todo con moditos y respeto, como el Corazón, corazón de Cristina García Ramos en La 1. Con Casal comenzó a presentar el programa María Contreras y después estaría en pantalla la recordada Isi Sayago (fallecida en 2013), que en cuestión de trajes de flamenca fue quien dio la primera voz a creadores y modelos.

Carmen Elías, Ana Garrido, Maribel Fatou fueron otras redactoras de este espacio del buen vivir y del saber estar que se extendió durante casi trece años en antena. Sergio Morante o José Pablo Ruiz fueron otros de esos rostros del programa que como reporteros, contertulios o lo que hiciera falta dejaron su impronta en el formato. El sevillanísimo Carlos Telmo sigue desde entonces colaborando y Sabino Moreno aportaba sus lecciones de estilo, tan aplaudidas por Inmaculada Casal.

¿Por qué terminó el programa 'Contraportada'?

No siempre tuvo un lugar fácil o cómodo en San Juan de Aznalfarache. La pareja de María del Monte sabe encarar turnos de noche, noticias arrinconadas pero a cambio disfrutó de la cobertura de la Expo y en sus redes comparte fotos de un baile por sevillanas con el mismísimo Curro. Sus circunstancias personales nunca fueron un inconveniente para su labor profesional.

Contraportada terminó en marzo de 2009 en pleno ataque de Sé lo que hicisteis, en La Sexta, contra todos los programas del corazón. Comenzaron por el Aquí hay tomate y con el bloqueo de Telecinco aquel espacio satírico halló su recambio en los espacios de TVE y en las autonómicas.

Varias inserciones del programa de Canal Sur, sobre unas pegatinas de Julián Muñoz y una aparición del reportero Perpetuo Fernández precipitaron un cierre que ahora sería cuestionable.

El espacio enviado entonces a la una y media de la tarde había perdido, lógicamente, espectadores, pero parecía como una marca superada. El entonces director general Pablo Carrasco prescindió del formato en vísperas de la fragmentación de la TDT en la etapa del mayor descenso de audiencia que ha sufrido la autonómica (no remontaría de las decisiones de aquellos años). Sé lo que hicisteis, que se excedió de prepotencia intelectual, no acabó con la información rosa, aunque se cargara Aquí hay tomate.

Inmaculada Casal siguió en las noticias sociales en los informativos y su siguiente programa, en 2010, fue De lujo, monográficos de figuras conocidas como la duquesa de Alba, con que se abrió este espacio por el que pasaron Antonio Gala, Curro Romero y hasta José Mercé, cantante del que esperamos verle alguna vez más en la televisión, que se le echa en falta.

Aquella chica de Andalucía Junta, ahora la veremos con asiduidad en las portadas. María del Monte dio el paso que tenía pendiente y, tal vez, ambas necesitaban que se conociera sin cuchicheos su relación y pudieran hablar de esa familia que tienen juntas en Andalucía.