Morante: no hay billetes para hoy...

Atrás han quedado unas triunfales -y triunfalistas- Colombinas; el arranque del abono veraniego del Puerto de Santa María y la certeza de que el personal, especialmente el más joven, anda con ganas de fiesta y toros mientras otros -cada vez más calados- siguen hablando de cancelaciones en un tiempo que empieza a oler a mudanza política y social.

Es posible que el aire no tarde en dar la vuelta en esta piel de toro acostumbrada a darse esos palos que inmortalizó Goya retratando como nadie alguna de las esquinas más oscuras del alma hispánica. Pero es mejor no andar por esas ramas y fijarnos en los llenazos que han registrado este fin de semana el coso de la Merced y la plaza de Real.

En las orillas de la Vega Larga se ha consagrado como ídolo a David de Miranda que dobló en la plaza de su tierra -había que cubrir la baja de Emilio de Justo, que no estuvo exenta de ciertas tensiones entre bastidores- desembarazado del papel de mero diestro local. Ha sido el gran e indiscutible triunfador de las Colombinas por más que Daniel Luque, que acudía de tapado, haya firmado la faena de mayor calado.

Pero hay otras cosas de contar del ciclo choquero, empezando por la excelente faena de Javier Zulueta -seguramente una de las mejores de su trayectoria- a las puertas de su alternativa o el magisterio de Diego Ventura -con la réplica apasionada de Andrés Romero- en la corrida de rejones que goza de un ambiente propio en Huelva.

El milagro se hizo esperar

En la Merced, eso sí, se quedaron sin ese milagro morantista que sí iba a suceder el domingo en El Puerto con el papel agotado sumando un nuevo recital a una temporada que quedará en los libros. Morante ganó ahí la mano a Roca Rey que sí había llenado en Huelva pero quedó lejos de colocar el ansiado cartelito de no hay billetes en la Plaza Real, dejando aplazado su nuevo encuentro con el genio cigarrero hasta el próximo 10 y en el mismo escenario. En el Puerto, por cierto, se habla más del toreo de Aguado que de la puerta grande del propio Roca y Manzanares, que despertó de su letargo.

El peruano, que no está cuajando su mejor año, había resultado cogido en la Merced sufriendo un fortísimo traumatismo en la rodilla. Sea como sea, el cambio de aires profesionales, el trueque de Roberto Domínguez por su hermano Fernando, no está ayudando a revertir cierto ambiente a la contra que más que una suposición es una auténtica certeza.

Morante y Roca: siguen los dimes y diretes

El culebrón, ya lo saben, se inició en Santander con el supuesto veto ejercido por el peruano ante el inesperado gesto de Morante, que se ofreció a cubrir la baja de Cayetano -que va a denunciar a los policías que le detuvieron en Madrid- donando sus honorarios a una causa benéfica de la capital cántabra. Ya se lo contamos pero el asunto suma un nuevo capítulo tras la entrevista concedida por el paladín limeño a la compañero Rosario Pérez.

¿Hay algún gatito escondido? Roca niega la mayor pero, sobre todo, hace un acto de conciliación mostrando su admiración por el torero de La Puebla. El asunto, ésa es la verdad, le está perjudicando por más que añada sal y son a esta temporada que abarrota plazas en torno al dios toro y la primacía de Morante. Como siempre fue.

Del festival de Madrid…

Pero ya que hablamos del rey de la temporada podríamos ir recogiendo otros datos que se han ido conociendo estos días. El maestro de La Puebla tiene prácticamente ultimado el cartel del festival homenaje a Antoñete que servirá para sufragar el monumento que se levantará en los aledaños de la plaza de Las Ventas. Ya es sabido que Morante se hará acompañar de toreros retirados de la talla de Curro Vázquez, César Rincón, Julio Aparicio y Enrique Ponce. Abriría a caballo el rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza y cerraría la novillera Olga Casado.

La idea es que el monumento estuviera listo para ser inaugurado en esa misma mañana, la del día del Pilar. Lo está labrando en la Palma del Condado el escultor Martín Lagares que ya ha colaborado con el diestro de La Puebla en otros proyectos como los bustos de José María Manzanares padre o de Ricardo Chibanga, donados por el cigarrero. En París se harán cargo de la ornamentación del basamento que sostendrá al viejo torero del mechón blanco, fundido en bronce sin separarse de su sempiterno cigarrillo.

Zabala de la Serna adelantaba otros datos interesantes días atrás como la elección de un ejemplar ensabanado del hierro de Osborne para evocar la célebre faena a Atrevido, el toro blanco que forjó la leyenda de Chenel antes de su gloriosa vuelta ochentera que le convertiría en figura.

Por cierto, es sabido que Morante se cambiará el traje corto por otro de luces para hacer un segundo paseíllo en Las Ventas ese mismo 12 de octubre. Acompañará la despedida de Fernando Robleño en un cartel completado por el confirmante Sergio Rodríguez que verá así premiada su victoria en la Copa Chenel.

…y el de Sevilla

En esa tesitura el festival organizado en la plaza de la Maestranza a beneficio de las bolsas de Caridad de las hermandades de San Bernardo y el Amor no se podría celebrar el día 12 si se quiere contar con el diestro de La Puebla como estrella indiscutible. Tampoco el 13, que es festivo, atendiendo al esfuerzo del maestro cigarrero en la jornada anterior.

Morante, además, tiene apalabrada la tarde del 18 de octubre en la feria de San Lucas de Jaén por lo que la fecha más factible para el festival sería la del domingo 19 de octubre. Será el cierre a la temporada 2025 en el coso maestrante, la última organizada por la empresa Pagés según los parámetros del actual contrato. Lo que pase después está por ver. Por cierto, la semana que viene cogemos un breve descansito...