Añoranzas de la Legión francesa
El escritor sevillano Joaquín Mañes realiza en su último libro el retrato de más de 70 ex legionarios
Lleva a sus espaldas seis novelas de temática bélica, abarcando prácticamente la totalidad de los conflictos armados de los dos últimos siglos. Sin embargo, en su última incursión literaria, Añoranzas Hispanas de la Legión Extranjera, Joaquín Mañes logra traspasar sus propias fronteras hasta adentrarse en ese terreno inhóspito que también conoce, si bien a través de una óptica diferente, la de los propios ex legionarios con los que ha convivido en las trincheras del recuerdo.
Sólo así, conociendo la voz, los relatos y la memoria de estos testimonios vivientes o los de sus familiares, ha construido el retrato de más de 70 españoles que ingresaron en las filas de la Legión francesa. Todo ello a través de una narrativa capaz de sumergirnos en el aroma a pólvora, el silbido de las balas sobre nuestras cabezas y los entresijos de operaciones militares.
El escritor sevillano explica que su obra puede considerarse heredera de Españoles en la Legión Extranjera Francesa. Al menos ésta fue la puerta que le permitió llegar a lectores muy vinculados a estos héroes anónimos, que poseían documentación o misivas que compartía con familiares o parejas, recortes de periódicos que podían enriquecer la obra, e incluso testimonio de ex legionarios que se sentían identificados con los avatares que se describía en la novela.
Este vínculo emocional con sus lectores, se congratula Mañes, "me permitió el que me confiasen una documentación que atesoré con mucho cariño y afecto, por cuanto forma parte de su intimidad y describen el espíritu indómito y aventurero". Cuando reparé, "me di cuenta de que tenía en mis manos un capital documental muy importante que podía dar lugar a una nueva obra con un enfoque diferente", más intimista si cabe, y con el que enaltecer la figura del hombre como protagonista" del cuerpo francés.
Como siempre, Mañes trata de indagar y desentrañar las razones personales que motivaron el alistamiento de españoles que, en muchos casos, "se encontraron ante la fatalidad de un destino que sólo les ofrecía una vía para escapar de la miseria, traspasar la frontera. Fue fuera de su patria donde comprobaron que la única vía laboral podía ser el alistamiento, aun a costa de enfrascarse en guerras que "emocionalmente no eran las suyas".
El escritor explica que en esta amalgama de personajes se encuentran "espíritus indómitos y aventureros en la mejor tradición de nuestros ancestros del siglo XVI; pero también soldados que desertaron tras no resistir o convencerse de que aquello no era su destino, aunque para ello tuvieran que arrastrar más peligros y aventuras que si hubieran permanecido siendo legionarios".
Así se narra la vida de José Lillo Lorite, un legionario paracaidista de origen sevillano del barrio de San Bernardo que murió en Dien Bien Phu durante una misión. Una historia que le marcó, dado que pudo conocer los pormenores de su trágica historia "a través de cartas enviadas desde Indochina que su sobrino Rafael conserva aún celosamente".
De esta forma, la novela, que se estructura de modo cronológico, desvela cómo las motivaciones de los soldados fueron cambiando durante los periodos históricos. En efecto, durante la guerra de Indochina el alistamiento tenía un origen económico que alcanzó su punto álgido en 1952, cuando Franco decidió eliminar la cartilla de racionamiento y muchos españoles se vieron empujados a cruzar la frontera.
En cambio, en la época de los 80 y 90 encontramos "un espíritu renacentista en el que los soldados comienzan a ser plenamente conscientes de que asumen la vida dura de un cuerpo de élite, si bien, en contraprestación, obtenían la seguridad económica de un trabajo estable.
Mañes es un consumado experto y conocedor de todos los vericuetos de la legión extranjera francesa, y la labor documental uno de sus sellos de identidad. En sus obras la veracidad nunca es una licencia, sino una obligación del escritor que ejerce de notario en los escenarios que radia. Sin embargo, en esta ocasión se congratula de haber tenido acceso a la fuente más certera: la de sus propios protagonistas. Una obra que les homenajea, narrando sus peripecias, sinsabores y sus aventuras.
El escritor debutó en el mundo de la literatura con El mito de Camerone, tras el cual le siguieron Sueños de Conquista, Españoles en Saigón; La Quimera de un Reino; Españoles en la Legión Extranjera Francesa, y Soldados sin Bandera, estas dos últimas bajo la editorial que posee.
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