Salir a conciertos: "En el público europeo hemos encontrado cariño y respeto"

Algo tendrán Las Migas que son capaces de levantar de su silla a cualquier tipo de público, ya sea andaluz, catalán o de la fría Dinamarca. Este grupo, nacido en Barcelona y que defiende sin complejos un estilo tan ecléctico como femenino, lleva desde 2004 recorriendo los escenarios de España y Europa. Con dos discos en el mercado y un directo que se renueva constantemente, actúa mañana en la Sala Omeya XXI de Mairena del Aljarafe, donde presentarán su nuevo repertorio.

Con una nueva formación musical -hace unos meses dejaban el grupo la guitarrista parisina Isabelle Laudenbach y la violinista berlinesa Lisa Bause y ocupaban su lugar la catalana Roser Loscos y la cordobesa Alicia Grillo-, Las Migas presentará mañana su disco Nosotras somos (2012) y sus nuevos temas, en los que se deja sentir un toque latino. "Nos apetecía hacer canciones más alegres", cuentan ya en Sevilla Alba Carmona (voz) y Marta Robles (guitarra). "Ahora estamos en un punto diferente, menos intimista", añaden. Desde que Alba, barcelonesa de origen andaluz, se incorporó al grupo en 2011, su voz flamenca se convirtió en parte indispensable del sonido personal de esta formación, que desde un principio contó con la guitarra y las composiciones de Marta Robles, nacida precisamente en Mairena del Aljarafe.

Diez años de trayectoria en los que el proyecto de Las Migas ha ido evolucionando y ganando seguidores tanto en Barcelona como en Andalucía, donde han girado por teatros y salas -en Sevilla han llenado sus últimos conciertos- con gran acogida. "Siempre que venimos al Sur notamos que el público nos quiere mucho, que está abierto a nuevos sonidos", explica Alba. Y nuevos sonidos es lo que propone el grupo en esta etapa, a la que esperan poner el broche con un nuevo disco durante los próximos meses. "Queremos grabar también un directo porque estamos trabajando mucho la puesta en escena", cuenta Marta.

Tras unos meses de trabajo para poner a punto la nueva formación, con la que ya han ofrecido tres conciertos, el grupo retoma su rumbo con más energía que nunca, algo que se refleja en su directo. Aunque es frecuente que Alba se marque unos pasos de baile sobre el escenario, para esta nueva etapa Las Migas ha preparado una puesta en escena más elaborada que incluye varias coreografías. "Queríamos darle un giro más teatral a nuestro espectáculo", dicen.

Para comprobarlo, sólo hay que pasarse mañana por la Sala Omeya XXI, para la que han preparado un espectáculo que es una lección de cómo la música no entiende de límites. Sobre el escenario, cuatro mujeres que proceden de mundos sonoros muy diferentes pero que es en la fusión donde encuentran su fuerza. Con la incorporación de Roser al cuarteto, el espíritu del jazz se hace más evidente y la técnica de la guitarra de Alicia -con formación clásica- cierra la propuesta con la que Las Migas afronta el futuro. Las acompañarán mañana las voces del cantaor Matías López y la actriz Belén López y las cuatro lucirán los vestidos que la hermana de Marta, María Robles, ha diseñado en exclusiva para su espectáculo. Además de su último disco, presentarán seis temas nuevos (dos de Marta y uno de Alba) y una versión de La rumba de Barcelona de Peret.

Alba, Alicia, Roser y Marta dan vida a una formación, hoy mitad andaluza y mitad catalana, que ha encontrado en el público europeo mucho "cariño y respeto". El último año han actuado en ciudades de Alemania, Francia y los Países Escandinavos , donde han podido comprobar, dice Marta, "que nuestra música se entiende en todo el mundo". Este verano volverán a girar por Europa pero antes, un poco más de Sur. Los próximos 22, 23 y 24 de mayo actuarán en Cádiz, Jerez y Algeciras.