El derbi, margen para Míchel

El resultado del partido en el Santiago Bernabéu no importa tanto como la imagen en un estadio en el que a Del Nido no le gusta quedar en evidencia. En el derbi tres días depués, en cambio, no importa tanto el buen juego como el resultado... Todo es una incógnita y una mezcla de sensaciones en las pocas horas en las que Míchel se va a jugar gran parte de su futuro profesional en el Sevilla. Las urgencias clasificatotorias que mantiene el Sevilla no se olvidan y la afición está muy pendiente de ello, pero no deja de entender que un buen resultado ante el Real Madrid en su estadio ahora que ha logrado afianzar su diferencia con el Barcelona va a ser casi una misión imposible para los nervionenses, mucho más con la gran cantidad de bajas que acumulan.

Pero Del Nido es un hombre que suele fijarse en pequeños detalles para decidir el futuro y esos pequeños -o no tan pequeños- detalles para él siempre fueron la imagen que su equipo daba en un escenario como el Santiago Bernabéu y el resultado de un derbi, sobre todo teniendo en cuenta que el Sevilla debe ser local en el enfrentamiento ante el eterno rival.

La continuidad de Míchel en el banquillo del Ramón Sánchez-Pizjuán, más complicada en los últimos días tras los resultados de las dos últimas jornadas en las que el Sevilla se ha alejado peligrosamente de Europa, depende en gran medida de lo que pase de aquí al 2 de mayo. No será definitivo, pero casi. Puede decirse que el ex entrenador del Getafe tiene de margen hasta el derbi, un choque que puede marcar, más para mal que para bien, las aspiraciones definitivas del equipo blanco en esta temporada. Del Nido ha dejado claro que la continuidad de Míchel estará en el aire si no logra meter al Sevilla en la Champions, según reza su contrato y lo que obligaría a ambas partes a firmar una ampliación. A casi nadie escapa que si al final del campeonato el equipo sevillista logra clasificarse para la Liga Europa el consejo entenderá que, de alguna manera, la temporada estará salvada y entonces Míchel tendría más opciones de seguir.

Si no es así, ciertamente el ex mundialista tiene complicado poder ampliar su estancia en Sevilla por mucho que las sensaciones finales hayan sido medianamente decentes, que en realidad no lo serán porque las oportunidades se han dejado escapar alarmante y dolorosamente. Así que lo que ocurra este domingo en el Bernabéu y, sobre todo, el miércoles en el derbi pueden marcar no sólo el futuro de Míchel, sino el del Sevilla y algunos de sus jugadores. Por ejemplo, una de las grandes incógnitas será saber qué ocurrirá con Jesús Navas y con Negredo si el Sevilla no tiene el respaldo de una competición europea para sostener la presión que se le avecinará. Será difícil que el Sevilla, que tendrá que reducir un presupuesto ya mermado en el último ejercicio, pueda mantener a futbolistas que probablemente estarán en la lista de Del Bosque para la Eurocopa de Ucrania y Polonia.

El Sevilla está a dos puntos de los puestos que dan derecho a jugar en Europa y, de seguir igual, así será a no ser que la competición ofrezca otras posibilidades. Es decir, si el Athletic entrara entre los seis primeros dejaría una plaza más por su condición de finalista de Copa, mientras que el Atlético de Madrid, si se proclamara campeón de la Liga Europa también añadiría una plaza más si se ganara un puesto por la clasificación en la Liga.

Pero en la planta noble del Sevilla nadie se plantea entrar en Europa de rebote después de ocho temporadas sin faltar en una competición europea. Es verdad que a día de hoy lo que menos interesa es quién será el inquilino del banquillo del Sevilla la próxima temporada, pero nadie discute que esa decisión está directamente conectada con lo que haga en las jornadas que quedan. Y las dos próximas tienen una importancia capital.