La Audiencia de Granada ha dejado sin efecto las medidas cautelares personales y reales acordadas en relación al padre Román, absuelto en el conocido como caso Romanones de los delitos de supuestos abusos sexuales a un menor. La Audiencia responde de esta forma a lo solicitado por el letrado del sacerdote, Javier Muriel, da cumplimiento a la parte dispositiva de la sentencia absolutoria y ordena que se expidan mandamientos de pago a Román.

Al procesado se le devolverán los 10.000 euros de la fianza carcelaria y los 50.000 de la responsabilidad civil que abonó en su momento, y también se deja sin efecto tanto la prohibición de acercarse al denunciante de los hechos y supuesta víctima, como la obligación de personarse una vez al mes ante el juzgado.

El pasado abril, la Audiencia granadina absolvió al padre Román por la falta de persistencia de la acusación y la concurrencia de "graves contradicciones" en la declaración de la supuesta víctima, pronunciamiento que coincidía con la retirada de la acusación que ya hizo la Fiscalía.