Un Bachibac en desventaja

Padres de alumnos que han realizado en el curso 2016-17 el Bachibac recurrirán a la vía judicial por los perjuicios que les ha ocasionado la homologación de la nota obtenida que ha realizado el Distrito Único Andaluz (DUA). El Bachibac es una iniciativa docente que ofrece a los alumnos la posibilidad de contar con dos títulos: el Bachillerato español y el Baccalauréat francés.

La homologación llevada a cabo por el DUA, sin comparación con otras comunidades autónomas, devalúa la calificación obtenida por los alumnos, de manera que se ha provocado un auténtico exilio hacia otros lugares en donde los afectados van a poder realizar los estudios deseados.

Manuel Perdiguero es padre de una alumna afectada. La ilusión de su hija es estudiar Medicina y en principio consiguió plaza en Cádiz. Actualmente se encuentra en la Juan Carlos I de Madrid. La hija de Francisco Alcaide también tiene como objetivo ese mismo grado. Eligió Sevilla y a toda prisa ha tenido que cambiar esa ciudad por Cádiz. En ambos casos, más de un mes después de que empezase el curso con los graves trastornos que supone un desplazamiento repentino e imprevisto.

En marzo de este año la Junta de Andalucía publicó una normativa en la que indica no reconocer la aplicación que, desde 2015, realiza la UNED para equiparar las notas del sistema docente francés por considerar que las infla. El resto de autonomías sí atiende el criterio de la UNED, institución recomendada por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas para efectuar la conversión de las calificaciones del extranjero.

Sin embargo, Andalucía invoca la Orden 1161/2010 por la que la UNED llevaba a cabo una valoración anterior a la actual y que en el caso francés es así: el sistema de aquel país califica de 0 a 20 en vez de 0 a 10 como es el caso del español. Con tan sólo dividir entre 2, se tiene la traducción al sistema español. Pero la UNED -que con el ministro Wert perdió la exclusividad de realizar las equivalencias-, aplica desde 2015 otro sistema que es el que sigue el resto del país. El hecho de que Andalucía mantenga el sistema antiguo de equiparación ocasiona que los estudiantes vean infravalorada su nota, y en muchos casos lo que en Francia es una matrícula de honor, en España se queda en un notable.

Los alumnos más perjudicados son precisamente los que han sacado mejores calificaciones, que en algunos casos incluso han llegado a perder un punto en comparación a sus compañeros del resto de España. De este modo, una nota francesa del 17,54 valorada por el DUA se queda en un 8,77, mientras que la UNED la sitúa en un 9,704. Del mismo modo, un 17,94 pasa a ser un 8,97 en Andalucía y un 9,77 en el resto de España.

El más duro de los efectos de esta degradación de la nota es que los alumnos han recibido en octubre una llamada desde universidades andaluzas avisándoles de que se han quedado sin plaza, pues al no admitir la calificación de la UNED la nota ha perdido un punto y no llegan al corte establecido en las facultad elegida.