Málaga prohíbe regar los jardines y campos de golf con agua potable y cierra las fuentes y los lavapiés

Pese a las primeras lluvias del otoño, la situación de sequía en Andalucía permanece. Los pantanos no han recuperado los niveles habituales para estas fechas, lo que ha provocado este jueves que Málaga haya activado nuevas medidas de ahorro entre las que están la prohibición del uso de agua potable para baldeo de calles y riego de jardines, e interrumpe el suministro de las fuentes de beber y los lavapiés en las playas.

Estas son algunas de las medidas incluidas en el bando que dictará en las próximas horas el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, en el que se pide la colaboración ciudadana para reducir en un 20% el abastecimiento urbano, en cumplimiento de la orden publicada el pasado 30 de octubre en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) ante la situación de excepcional sequía.

La concejala de Sostenibilidad Ambiental, Penélope Gómez, ha explicado que las nuevas medidas conllevarán limitaciones de uso de agua potable, aunque sin afectar al suministro doméstico.

El bando establece la prohibición de usar agua potable para el baldeo de calles, llenado de piscinas privadas, riego de jardines, parques públicos o privados y campos de golf, así como el lavado de coches fuera de los establecimientos autorizados, y en fuentes ornamentales sin circuito cerrado de agua, así como de duchas y surtidores públicos.

Aunque el uso de las fuentes de beber apenas representa un 0,057% del consumo total de la ciudad, el Ayuntamiento ha establecido cortar el servicio en cumplimiento de la orden de la Junta, una medida que no afecta a las fuentes ornamentales, ya que cuentan con un circuito cerrado de agua.

En cuanto a los lavapiés de las playas, cabe recordar que el pasado 8 de agosto se cerraron las duchas, pero se optó por mantener el suministro en dichas instalaciones, que ahora quedan desactivadas como medida de concienciación de la población.

Según los cálculos de Emasa, el consumo que generan ambos servicios en las playas no llega al 0,24% del total.

Respecto a la prohibición de riego con agua potable de parques y jardines públicos, el Consistorio señala que en verano ya se redujo a la mitad su utilización (el 95% se riega con agua del freático).

Se advierte de que la Policía Local podrá realizar tareas de vigilancia y control del cumplimiento de lo establecido en este bando y que mientras esté vigente, estos usos serán constitutivos de infracción, con sanciones de hasta 6.010,12 euros en el caso de infracciones leves.

Además de las medidas para reducir el consumo de agua procedente de los embalses del Guadalhorce, Gómez ha indicado que están previstas actuaciones para reducir las fugas y optimizar la capacidad de tratamiento de la desaladora de El Atabal, así como aumentar las aportaciones de recursos extraordinarios procedentes de nuevos pozos, además de los de Aljaima y Fahala.