"Hay que tener claro que estás aquí como un premio, tu equipo es el Sevilla Atlético". La frase es de Rodri, el héroe de la Copa del Rey juvenil de 2009, el superhéroe de Almería, un atleta que representa la ambición de esta camada de campeones unidos por la humildad y la ilusión de cuajar en el Sevilla de los títulos y de la Champions. Son chavales llanos, gente del pueblo. La Motilla, Pedrera, Lebrija, San José del Valle y Sevilla Este vieron crecer a unos futbolistas que no se dejan deslumbrar por el brillo de Palop, Kanoute o Jesús Navas. Ellos saben cuál es el camino y quiénes son sus guías en el duro sendero hacia la élite.

Rodrigo Ríos Lozano (Cabrejas del Pinar, 6-6-90) es un menudo goleador criado en La Motilla que está preconvocado para un partido clasificatorio del Europeo sub 21, en Finlandia el 11 de agosto, junto a Diego Capel. Es veterano en esto de las concentraciones: "Es la segunda pretemporada, me encuentro mejor que el año pasado. Tengo que seguir trabajando para intentar hacerme un hueco en la primera plantilla y hay que esforzarse al máximo. Lo hecho hasta ahora no significa nada". A Rodri aún lo paran por la calle para recordarle la importancia de su gol en Almería: "Es el trabajo lo que importa. Claro que está difícil hacerse un hueco ahí, porque hay delanteros de mucha talla, Kanoute, Luis Fabiano, Negredo, todos los que hay. Es muy difícil entrar, pero no es imposible", dice con ilusión.

"Esto es un premio, te sientes un privilegiado aquí", dice Dani Jiménez López (Lebrija, 5-3-90). Lleva siete años en la cantera sevillista, desde donde llegó del Antoniano, como Cala. Su abuelo Paco López fue el que lo metió en el fútbol. "Desgraciadamente murió hace cinco años y siempre llevo una camiseta con su nombre". A sus 20 años, el meta es el único de los cinco que aún no ha sido internacional. "Ahí estamos trabajando, para intentar conseguirlo", dice el portero lebrijano, campeón juvenil de la Copa del Rey de 2009. "Tengo una satisfacción muy grande por hacer la pretemporada con tu equipo. Y no es uno cualquiera, es un club que gana títulos, que se mete en la Champions. Por ello, tengo que intentar aprovechar todo lo que estoy aprendiendo. Que no se arrepientan de haberme traído. Tanto Andrés (Palop) como Javi (Varas) están ayudándome mucho. Ante cualquier duda, cualquier error, ellos están ahí corrigiéndote y dándote consejos. Yo memorizo y visualizo los consejos y los llevo a la práctica. Ahí puede estar la diferencia entre encajar un gol o no. Son situaciones de colocación, de blocaje. Andrés tiene un blocaje impresionante", dice casi de corrido, entre mensajes de gratitud y de elogios. Admirador de Casillas, su ídolo y maestro lo tiene bien cerquita: "En otros clubes no sé si se vivirá lo que aquí con Andrés, porque transmite una energía... Es como si volviera a una etapa anterior suya. Pese a los 36 años y todo lo que ha conseguido se toma cada entrenamiento como el último y se lamenta por cualquier fallo. Es un líder y tiene la ambición de seguir triunfando".

A Antonio Luna Rodríguez (Son Servera, Palma, 17-3-91) su acendrado sevillismo le llega por vía familiar. Su padre y su tío son nombres de alcurnia en la Peña Sevillista de Pedrera, su auténtica localidad de origen. Fue uno de los héroes de Almería y de la final de la Copa. "Tengo unos recuerdos impresionantes, el momento en que entramos al Camp Nou, y eso que el campo todavía no estaba ni medio lleno y luego, uf, impresionante", dice este lateral zurdo de carácter: "Me encanta Fernando Navarro, tácticamente es muy bueno y defensivamente es perfecto, y sabe subir". Aun así, su línea es la de la humildad. "Estoy aquí como un canterano más, con muchísima ilusión y ganas de hacer las cosas bien para que el míster sepa que puede tirar de nosotros. Me considero jugador del Sevilla Atlético al cien por cien". Luis Milla no se lo ha llevado al Europeo sub 19, pero eso le ha permitido completar la pretemporada con el Sevilla: "Tenía mucha ilusión por ir, no me ha llevado y estoy en otra cosa igual o mejor, estar aquí con el primer equipo".

El siguiente en orden de edad es Luis Alberto Romero Alconchel (San José del Valle, Cádiz, 29-9-92), un mediapunta de exquisita clase que lleva siete años en la cantera blanca. Coronado campeón juvenil también en 2009, está preconvocado con la sub 19 para un torneo en Japón, en agosto, "una motivación extra". "Para todos los que estamos aquí de la cantera es un privilegio estar junto a un equipo como el Sevilla, con grandes internacionales, incluso campeones del mundo como Navas". Fue a la final en Talgo con Salva, compañero del filial. "Disfrutamos mucho viendo allí a Luna y Rodri. Fue un día especial para mí, para ellos ni le cuento". Los técnicos quieren que se inmiscuya más en el juego: "Quieren que le dé más velocidad al juego. Se juega muy rápido, pero me veo bien con ellos, junto a Renato, a Freddy...".

El benjamín de esta camada de campeones es José Gómez Campaña (Sevilla, 31-5-93). Pasó del cadete al Sevilla Atlético y en 2009 hizo la pretemporada con el primer equipo. Este año repite, porque los técnicos tienen una tremenda confianza en la proyección de este medio con mando en el campo. "Me fijo mucho en Renato, por su calidad y por su personalidad". Es internacional sub 18 y llegó al Sevilla con siete años, como benjamín. "Este año cumplo 10 en el Sevilla. Mi padre -conocido como Risca futbolísticamente- jugó en el Betis Deportivo, desde chiquitillo me ha apasionado el fútbol", dice sobre sus orígenes. "Para mí es un orgullo estar aquí siendo tan joven. Es un club grande que mira mucho la cantera. Soñaba con estar aquí y ahora mi próximo sueño es debutar en Nervión. Es difícil llegar, pero también lo es mantenerse y vamos a tener que luchar, siempre con humildad, para poderme asentar en el Sevilla". Es el deseo de todos, cuajar en un club especial para ellos, como refiere Dani Jiménez: "El Sevilla es como nuestra segunda familia. Nos dio la opción de ser lo que somos y tenemos que agradecerle todo lo que nos ha dado".