Siete días, una eternidad

El Sevilla mantiene abiertos todos los frentes para el tercer delantero, con Llorente, que ayer fue suplente, como prioridad. El temor a un 'clausulazo' sigue ahí.

Llorente celebra un gol el curso pasado; ayer salió en el minuto 79.
Eduardo Florido Sevilla

24 de agosto 2015 - 05:02

Siete días quedan desde hoy para que se cierre la ventana estival de traspasos, una eternidad en la que puede pasar de todo. Los grandes clubes aún tienen mucho que decir en este periodo en el mercado internacional y esto también afecta al Sevilla. La anticipadísima planificación que ha ideado la dirección deportiva esta temporada todavía debe perfilarse con el tercer delantero solicitado por Unai Emery. Con prácticamente todos los fichajes disponibles para el entrenador desde la misma concentración de La Manga, la definición de la vigésima cuarta ficha, la única que queda libre para la Champions (en Liga aún quedaría una, una vigésima quinta que podría usar Cristóforo) tiene muy atareado a Monchi estos días, con Fernando Llorente como principal prioridad. En este largo lapso de tiempo, la Juventus aún espera alguna operación suculenta por su cuarto delantero, y eso afecta lógicamente al Sevilla.

De aquí al 31 podría pasar cualquier cosa respecto a Llorente. Por eso, el club nervionense, que casi lo dio por atado la pasada semana, mantiene abiertos todos los frentes para contratar a uno u otro de los candidatos según los condicionantes de esta última semana de mercado. La principal alternativa sigue siendo Negredo, a pesar de que ya jugó el último cuarto de hora ante el Mónaco en la previa de la Champions y fue titular en Vallecas. El ex sevillista sabe que Nuno Espírito Santo lo tiene como recurso tras Alcácer, el titular para el portugués. De hecho, el canterano valencianista partió en el once ante el Mónaco y descansó en Vallecas para estar fresco en el partido clave del estadio Luis II. Incluso Rodrigo también descansó como titular ante el Rayo. El ex capitán sevillista necesita más protagonismo, el mismo que tenía en Nervión, y Nuno no vería mal darle solución a la situación incómoda de tener como actor secundario a un futbolista de su peso específico. Por tanto, y ya que haber jugado minutos en la previa con el Valencia no le impide jugar la fase de grupos de la Champions con otro equipo, no hay que descartar por ahora al vallecano.

Todo dependerá de lo que ocurra estos días con Llorente. La Juventus continúa con su dura postura después del principio de acuerdo al que parecían haber llegado las partes para una cesión. La petición de esa opción de compra obligatoria que no está dispuesto a satisfacer el Sevilla podría tener un giro positivo si el jugador presiona en Turín, ante la realidad de que parte por detrás de Morata, ahora lesionado pero que volverá a ser la referencia ofensiva del equipo de Allegri, Mandzukic, titular ayer en el estreno liguero ante el Udinese, y Zaza. Llorente estaba entre los 22 citados -en Italia se permiten hasta 12 convocados-, pero permaneció en el banquillo hasta que el Udinese marcó el 0-1 en el 78.

Y si es una eternidad una semana para la llegada del delantero, más lo es en el caso de una posible salida no deseada. El temor a un inesperado clausulazo sigue ahí, aunque las conversaciones de Monchi con los futbolistas más golosos, léase Krychowiak, Vitolo o Banega, han sido positivas. No obstante hasta el 1 de septiembre está abierto el periodo de inscripciones en la Premier League, y el riesgo de que algún gran club inglés alce la voz es latente. La eternidad más un día...

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