El segundo parón de la Liga les vendrá de maravilla a cuatro de los futbolistas que padecen distintas dolencias, todas musculares. A Rami y Carriço, que continúan en su proceso de recuperación de sendas lesiones producidas en Ipurúa, se les unieron el sábado, en el caluroso partido frente al Alavés, Vietto y Nasri.

En el caso de los atacantes, hay optimismo, con matices. Ninguno de los dos padece rotura fibrilar, aunque Nasri debe ser "sometido a pruebas complementarias para reconfirmar el primer diagnóstico", es decir, la elongación en el isquiotibial izquierdo, que padeció tras una entrada por detrás de Marcos Llorente cuando avanzaba hacia el área. La resonancia a la que se sometió este lunes Vietto también descartó una rotura. El delantero, lastimado apenas tres minutos después que Nasri, padece "una sobrecarga en el glúteo medio de la pierna derecha".

Evidentemente, ninguno de los cuatro jugadores lesionados se ejercitó este lunes con el grupo en la vuelta al trabajo del equipo tras la jornada de descanso del domingo. En la sesión vespertina la principal novedad fue la vuelta de David Soria, tras casi dos meses fuera debido a la fractura de las falanges.

En cuanto a Rami y Carriço continúan con "su plan específico de recuperación, al igual que Tremoulinas, que continúa con buena evolución", según el parte ofrecido por el club. Los centrales, al igual que Nasri, están pendientes de una nueva evaluación esta misma semana para comprobar cómo va la evolución de sus problemas (en el isquiotibial el galo y en el recto anterior el luso) y valorar los plazos de su vuelta.