El voto por tierra, mar y aire

"Hola. Soy Antonio Muñoz, candidato del PSOE a la Alcaldía de Sevilla. Espero contar con su voto el próximo 28 de mayo”. No han sido pocos los vecinos de Sevilla que se han encontrado con esta locución al descolgar el teléfono fijo de sus hogares en los últimos días. Se trata de una estrategia del Partido Socialista ya usada en las municipales de 2019 y las autonómicas del pasado mes de junio para captar el apoyo de los mayores que salen menos de casa. Es un recordatorio de elecciones, una forma de que sepan que el último domingo del mes hay que bajar a votar al colegio.

No es la única estrategia que siguen los partidos políticos. Otra en la que trabaja el gobierno socialista es la movilización de los más jóvenes que suelen salir de la ciudad los fines de semana en busca de la costa u otros destinos. En este caso no son llamadas telefónicas, sino campañas en las redes sociales. Otra maniobra para evitar que la abstención sea alta tiene relación con la Romería del Rocío. Un ejemplo son las visitas en campaña electoral (e incluso días antes) de los candidatos, como el popular José Luis Sanz, a las hermandades del Rocío. La intención es clara, recordar a los peregrinos que voten por correo antes de marcharse a la aldea. Incluso la Macarena anima al voto en sus redes sociales para que “puedan disfrutar del camino” teniendo en cuenta que la salida de la Virgen se producirá pocas horas después del cierre de las urnas. Todo es poco para unas elecciones que se vislumbran bastantes igualadas si nos atenemos a los sondeos publicados y las sensaciones dentro de los partidos.

La hermandad deja claro que, “por encima de ideologías y sin entrar en un partido u otro”, lo único que pretenden es que los rocieros “podamos disfrutar del camino sin tener que preocuparnos por el hecho de tener que regresar a Sevilla a votar, y al mismo tiempo, recordar la importancia de cumplir como ciudadanos en esta nueva cita con las urnas”.

No es la primera vez que coinciden las elecciones con una Romería del Rocío. Sucedió tanto en las municipales de 2007 como en las de 2015, si bien lo normal es que sean los partidos políticos quienes, con más insistencia, apelen a los votantes a emplear esa fórmula del voto por correo para contrarrestar la posible aparición del fantasma de la abstención. En 2019 fueron 223.008 sevillanos los que no acudieron a votar, lo que supone cuatro de cada diez electores.

Entre los repartos electorales de cada día, los candidatos a la Alcaldía de Sevilla por el PSOE y el PP evidenciaron ayer en el único cara a cara electoral de la campaña (organizado por la cadena Ser) sus opuestas visiones en un debate tenso. Con constantes interrupciones, los aspirantes discreparon en varias ocasiones sobre el papel que ha jugado la Junta y el Gobierno para impulsar grandes proyectos para la ciudad como la línea 3 del Metro.

El regidor reconoció que la movilidad es un “talón de Aquiles” de la ciudad pese al “salto vertiginoso” de los dos últimos años. “Aunque lo niegue, Sevilla está en marcha y transformándose, frente a su proyecto para la ciudad que supone pasos atrás, la parálisis”, indicó Muñoz, tras escuchar de Sanz que el tráfico es una “ratonera por la ausencia” de proyectos de su gobierno. Ambos compartieron la necesidad de que Sevilla cuente con una ley de Capitalidad y en afrontar el problema de la turistificación.