Podemos y UPyD podrían dar la alternativa a IU en el Parlamento

Ninguna elección es extrapolable, y menos unas europeas sobre cualquier otra, debido básicamente a que su circunscripción es única -todo el país- y no provincial. Aun así el resultado que dieron las urnas el pasado domingo sirve para tener una idea de cómo está cambiando la opinión pública andaluza. Y hay dos hechos: la izquierda se fragmenta en tres formaciones, pero el PSOE gana en este reequilibrio de fuerzas. Con los resultados del 25-M, el PSOE hubiera vuelto a conseguir una mayoría aceptable para gobernar porque podría decidir entre varios socios. UPyD, el partido de Rosa Díaz, y Podemos, el de Pablo Iglesias, entrarían por vez primera en el Parlamento andaluz, incluso con diputados suficientes para formar grupos propios. UPyD y Podemos sobrepasaron la noche del domingo el 7%, lo que les convertiría en la novedad de una Cámara en el que el único cuarto y quinto grupo fueron dos partidos andalucistas distintos.

Con un apoyo del 36%, los socialistas volverían a ser la fuerza más votada y habrían alcanzado los 51 diputados, insuficientes para la mayoría absoluta, que está en los 55. No obstante, los acuerdos en la Cámara habrían sido fáciles, ya que los socialistas tendrían dos partidos de izquierdas con los que hablar: IU, sus socios actuales, y Podemos. Ello le permitiría al PSOE gobernar con uno de ellos dos, con ambos e, incluso, con un simple pacto de legislatura, sin la entrada de socios.

El PSOE también se podría apoyar de modo puntual en UPyD. IU se quedaría con los mismos parlamentarios que en la actualidad, y es que la formación de izquierdas apenas ha incrementado los votos si se compara con las pasadas elecciones autonómicas. Los populares perderían 15 parlamentarios, una gran debacle.

No obstante, esto es sólo una aproximación. Las autonómicas se celebran con una participación mucho más alta del 43%, lo que ya cambiaría de por sí todo el panorama. Partidos como UPyD ya obtuvieron en Andalucía un buen resultado en las pasadas elecciones generales, pero no tuvo su traducción en las andaluzas. Es posible que estos partidos sólo sean contemplados por el electorado andaluz en grandes ocasiones.

Quienes sí constituyen una seria duda son los electores de Podemos. El partido de Pablo Iglesias, inspirado en el movimiento del 15-M, no tiene ninguna implantación territorial, aunque su número dos en Europa es una profesora de un instituto de Rota. Hay que esperar a ver si Podemos consolida este voto de izquierda, que parece no salir de IU, sino de descontentos que hasta ahora no votaban por edad o por desafección.

El partido de Rosa Díez también ha tenido un gran resultado respecto a las pasadas elecciones europeas. No obstante, esta formación, que se deja ver desde hace años en los sondeos andaluces, carece aún de parlamentarios andaluces y de regidores en poblaciones.