La prohibición de vender animales en tiendas prevista en el anteproyecto de Ley de Protección y Derechos de los Animales trasladará su comercio "sin control" a internet y supondrá la pérdida de 50.000 empleos, según la Asociación Española de Distribuidores de Productos para Animales de Compañía (Aedpac).

En caso de que la futura ley se apruebe con su actual redacción, en la que no se hace mención al comercio online, la venta de animales quedará limitada a criadores.

"Esto va provocar un brutal aumento de la venta de animales a través de internet o que la gente que quiera ver el animal se vaya a Francia o Portugal a comprarlo", ha advertido en declaraciones a Efe el presidente de Aedpac, Adolfo Santa-Olalla, quien ha subrayado que esto "arruinará a muchas de las tiendas para nada" porque los animales pasarán a estar desprotegidos.

En su opinión, la propuesta de normativa es "una barbaridad" y es lamentable que se haya redactado sin contar con la opinión del sector ni del mundo de científico y veterinario.

La venta de animales representa actualmente entre el 30 y el 50 % de la facturación de las tiendas y su prohibición implicará que la mitad de los establecimientos, unos 2.500, tenga que cerrar y que unas 50.000 personas se vayan al paro, según Santa-Olalla, quien ha subrayado que también tendrá efectos indirectos en distribuidores y mayoristas.

Excepto los criadores de perros o gatos, el resto desaparecerá porque los que crían animales de "poco valor" unitario, como por ejemplo hamsters, también tendrán que cerrar, pues no será rentable para ellos vender al por menor.

"No obstante, el gran problema está en que mientras se prohíbe la venta en tiendas físicas, que están reguladas y que se pueden inspeccionar en cualquier momento, en el anteproyecto no hay ni una palabra sobre internet", donde ya se publican cientos de miles de anuncios de venta de animales sin control alguno, ha insistido.

Así, en lugar de proteger a los animales con su venta controlada en establecimientos reglados, se pasará a dejarlos totalmente desprotegidos en la red, donde es imposible verificar las condiciones en las que se encuentran y que ya es un coladero de especies prohibidas.

Además, no solo se destruirán puestos de trabajo existentes, sino que también afectará a aquellos que estaban por venir, pues toda esta incertidumbre regulatoria ha frenado la inversión en España en un sector en auge como es el de las mascotas.

Santa-Olalla confía en que, de llegar al Congreso en su actual redacción, el texto, promovido por Unidas Podemos, pueda ser modificado durante su tramitación parlamentaria, para lo que están recabando apoyos dentro de la oposición.

En este sentido, ha asegurado que partidos como VOX y PP están absolutamente en contra y ha explicado que tienen previsto reunirse en breve con representantes del PSOE, "donde ya suenan voces dispares".