Un nuevo uso social y cultural para las conocidas 'catedrales del campo'

Su figura destaca en el perfil de cualquiera de los municipios de Sevilla. Los silos, esas construcciones imponentes que se multiplicaron tras la Guerra Civil por el paisaje rural de una España destrozada en la que guardar las cosechas en condiciones adecuadas era fundamental buscan una nueva oportunidad. "Estos edificios de la Red Nacional de Silos han desempeñado un papel fundamental durante una época en España. Considero que es un patrimonio colectivo digno de protección, no sólo por su pasado, ni por su singularidad constructiva, si no por la oportunidad, empresarial y social, que supone darles nueva vida", explica Jerónimo Cejudo, decano del Colegio de Agrónomos de Andalucía.

Este organismo y el Grupo de Investigación SilosyGraneros.es apuesta por la rehabilitación de los silos, reutilizando estos edificios con nuevos usos, equipamientos y servicios que contribuyan a generar empleo. Ambos organismos han llamado la atención sobre la situación de estos edificios tras la puesta en venta por parte del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), del Ministerio de Agricultura, de 27 unidades de la histórica Red Nacional de Silos de España ubicados en 26 pueblos de 11 provincias de Aragón, Castilla León, Extremadura y Madrid. Jerónimo Cejudo, destaca "la importancia de mantener y recuperar este patrimonio histórico, estas catedrales del campo".

En la provincia, de los 35 edificios existentes, 23 tienen un nuevo uso. De este modo, en el silo de Fuentes de Andalucía se ha instalado un mirador turístico y centro de visitantes, premiado por la Fundación Patrimonio Industrial de Andalucía. En el de Carmona, el ayuntamiento aprobó su uso cultural, pero no ha comenzado nada. El de Lebrija está en trámites de estar protegido urbanísticamente. Por último, el de Utrera se reconvirtió parcialmente como centro ocio juvenil. Sólo se operó sobre las naves de los dos silos pequeños.